Acustik Noticias
Tras su renuncia a la dirección del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y reincorporación al Senado de la República, Germán Martínez Cázares aceptó que no se arrepiente de haber abandonado la dirigencia de la dependencia de salud que se encuentra apócrifa y dijo no querer ser parte de los recortes en salud, pues es inhumano y los únicos que sufren son los pacientes.
En una entrevista con el medio El Universal, Germán Martínez aseguró que el presidente Andrés Manuel López Obrador y el coordinador de Morena, Ricardo Monreal no se sorprendieron de la noticia de su destitución autónoma, pues una semana antes les informó sobre esta.
Martínez Cázares manifestó que su iniciativa para abandonar el cargo como director del IMSS se debió a que no quería ser perseguido por los ‘duendes hacendarios‘, a quienes señaló en su carta de revocación de entrometerse en las funciones de la dependencia, misma que se determina como un organismo autónomo que administra su patrimonio ‘con reglas especiales’.
Martínez Cázares consideró que las labores de Zoé Robledo Aburto al frente de la dependencia serán buenas, pues aunque no es doctor tiene sensibilidad social, lo que manifestó les falta a muchos políticos, a quienes no les importa que las consecuencias de los recortes sean pagadas por los enfermos de cáncer.
Los niños con cáncer, los diabéticos, quienes esperan una operación no se curan con discursos, sino con dinero. Tiene que invertirse en salud. Los gobiernos progresistas gastan en la materia; estamos condenando a los más pobres a atenderse en la salud privada, a hacer rica a la atención médica privada a que los medicamentos sean una mercancía cuando deben ser un derecho”.
Ante el cuestionamiento sobre su supuesta traición a López Obrador, Martínez Cázares puntualizó que nada de lo emitido en su discurso de renuncia fue en contra de lo expreso por el mandatario y afirmó su renuncia no tenía nada de qué ver con él sino con los movimientos al interior del IMSS.
Nadie encontrará una línea, una palabra, un renglón de reproche al presidente”.
El senador acuso al PRI de haber dejado una ‘herencia maldita‘ al gobierno de López Obrador, mismo que a falta de recursos que sostengan el sector salud ha determinado la medida de los recortes presupuestales, por lo que ha sido duramente criticado.
Martínez Cázares señaló que la administración del presidente Enrique Peña Nieto y gobernadores de diversas entidades saquearon los recursos del Seguro Popular, lo que devino en una crisis al interior del IMSS.
La crisis la hereda el gobierno de López Obrador. Hay una herencia maldita del PRI en el sistema de salud; la hicieron las ladronerías que daban agua en lugar de medicina en Veracruz; los gobernadores que robaron del Seguro Popular en lugar de darle instrumental y herramientas a los hospitales”.
Con información de Vanguardia, El Universal y Acustik Noticias
Fotografía Cuartoscuro