La Sader, el Banco Interamericano de Desarrollo y la FAO participaron en una reunión virtual para evaluar la posibilidad de reactivar los sistemas agroalimentarios de este lado del hemisferio tras las medidas de contención sanitaria ordenadas por los gobiernos.
El secretario de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), Víctor Villalobos Arámbula, el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Luis Moreno Mejía, y el subdirector general para el Desarrollo Económico y Social de la Organización de las Naciones para la Alimentación y la Agricultura (FAO por sus siglas en inglés), Máximo Torero Cullen, intercambiaron ideas y experiencias enfocadas a fortalecer los sistemas alimentarios en la región ante los efectos del COVID-19.
Videoconferencia, c/ el pdte. de @el_BID, @MorenoBID, y el Economista en Jefe y Subd. Gral. p/ el Desarrollo Económico y Social de @FAO, Máximo Torero Cullen: Compartimos acciones y experiencias enfocadas a fortalecer sistemas alimentarios regionales ante los efectos del COVID 19 pic.twitter.com/YDRJCrnao4
— Víctor Villalobos Arámbula (@vmva1950) May 14, 2020
Mediante videoconferencia, las autoridades participaron en la mesa de trabajo “Retos para la seguridad alimentaria en América Latina y el Caribe en el contexto del COVID-19”, donde coincidieron en la importancia de la cooperación global para atender la trilogía conformada por la salud, los alimentos y el desarrollo económico.
El titular de la Sader manifestó la importancia de trabajar en una agenda de trabajo con los ministros regionales de América enfocada a garantizar la producción y suministro de alimentos, a través de un cambio en los sistemas agroalimentarios con el fomento de la innovación y las tecnologías y la promoción del financiamiento en el sector.
Así mismo, señaló que el Gobierno de México prioriza la ayuda a productores de pequeña y mediana escala en zonas rurales. El objetivo es lograr fortalecer las medidas de sanidad e inocuidad en el sector agroalimentario y los canales de comunicación en 34 países de América.
Por su parte, Moreno Mejía, indicó que las circunstancias actuales marcan un cambio en el paradigma estructural del sistema de seguridad alimentaria, cuyos efectos en países de Centro y Sudamérica ya se visualizan con problemas de inflación, y en la operatividad de algunas áreas de los sectores productivos.
Igualmente, aseguró que la pandemia por el COVID-19 llevaría a más personas a caer en situación de inseguridad alimentaria e instó a trabajar en equipo para superar retos y desafíos dentro del sector agroalimentario.
A su vez Torero Cullen, detalló que en el contexto de la pandemia global es necesario satisfacer las necesidades de la oferta y la demanda principalmente en cereales, frutas y cárnicos, la logística para el transporte y suministro de alimentos, así como la mano de obra en la agricultura y la agroindustria.
También explicó que la mayor parte de las exportaciones agroalimentarias de América Latina y el Caribe van a China y Estados Unidos, vulnerando la seguridad alimentaria de la región al momento presentarse un problema como el brote de contagio por COVID-19.
Finalmente, todos los participantes coincidieron en la necesidad de crear un plan de acciones conjuntas para fortalecer los protocolos sanitarios que favorezcan la producción y abasto en los mercados internos y externos.
Imágenes tomadas de Gobierno de México