En una ciudad de derechos y libertades es importante garantizar seguridad a la población en cualquier ámbito en el que se encuentre. En este sentido, Elizabeth Mateos Hernández, coordinadora de la asociación Parlamentaria Mujeres Demócratas destacó la necesidad de aplicar rigurosamente la ley sobre sobre quien siendo médico cometa delitos sexuales como lo es la violación.
Por ello y ante el pleno del Congreso capitalino, Mateos Hernández realizó una propuesta legislativa para incrementar en dos terceras partes las penas previstas en el código penal a los médicos y terapeutas que abusen sexualmente de sus pacientes.
Es necesario -dijo- establecer mecanismos que permitan garantizar a la población la seguridad de que, en caso de resultar víctimas de este tipo de actos, los autores no queden impunes ante la falta de normatividad al tiempo de garantizar a plenitud y salvaguarda y tutela de los derechos de las personas.
Cualquier forma de violencia sexual es inaceptable y debe aplicarse la ley, especialmente cuando se trata del abuso de profesionales en el que su trabajo se basa esencialmente en la confianza, la comunicación abierta y la colaboración tal como el caso de los médicos, terapeutas y sus pacientes, destacó.
Lamentablemente existen casos en los que se han roto estas relaciones debido a delitos de abuso sexual cometidos por los profesionales de la salud. En estos casos, se ha producido una clara violación de la confianza lo que puede tener consecuencias graves para la salud física y emocional de las víctimas, subrayó Elizabeth Mateos.
Ejemplo de ello, mencionó la diputada por Iztacalco, en el ámbito de la atención médica ha habido situaciones en los que los profesionales de la salud han abusado sexualmente de pacientes mientras se llevan a cabo exámenes físicos, procedimientos médicos o consultas privadas. En algunos casos, utilizan su posición de poder para coaccionar o amenazar a los pacientes para que no informen sobre los abusos.
De acuerdo a diferentes medios de comunicación, en México existen casos, por ejemplo, en el estado de Chiapas, donde una paciente quién omitió su identidad, fue víctima de su doctor, quien presuntamente realizó tocamientos indebidos por lo que la víctima salió del consultorio para pedir auxilio a sus familiares.
Otro caso, recordó la también integrante de la Junta de Coordinación Política, es el sucedido en el Hospital Ángeles del Pedregal, con el Ginecólogo Alfonso “N”, quien fue acusado por sus pacientes de hacer tocamientos innecesarios y alegaron sentir incomodidad en las consultas.
Casos como los anteriores existen y deben parar, la violación sexual es un crimen atroz que causa un daño irreparable a las víctimas. Es una violación a los derechos y dignidad como seres humanos, de ahí la importancia de incrementar las penas a quienes rompen con la confianza y abusan de su posición para lastimar sexualmente a las personas que acuden a su consulta médica, señaló.
Debemos trabajar para construir una sociedad en la que la dignidad y el respeto sean los valores fundamentales que rijan nuestras relaciones, y donde los abusos y las agresiones no tengan cabida, finalizó Elizabeth Mateos.