Ante la restricción de la liquidez global que podría ocasionar el conflicto entre Israel y Hamás, Ricardo Monreal Ávila llamó a la prudencia respecto a la determinación de la Ley de Ingresos y del Presupuesto de Egresos de la Federación.
La guerra en Medio Oriente, indicó, podría conducir a tasas de interés desfavorables con la consecuencia inevitable de un aumento en los precios de las materias primas, “un enorme reto para el equilibrio financiero de México.”
Sin embargo, mientras el conflicto nubla la dinámica del comercio global, el nearshoring surge como un rayo de esperanza, ya que muchas empresas estadounidenses estarán buscando bases operativas más próximas, manifestó el político zacatecano.
México, con su ventaja geográfica y sus vínculos profundamente arraigados con Estados Unidos, podría ser la respuesta, explicó.
En un análisis compartido en sus redes sociales, Monreal destaca cómo puntos favorables en este escenario, la proyección del tipo de cambio de 17.10 pesos por cada dólar estadounidense para finales del 2024, lo que sostiene la fortaleza prevista del peso mexicano.
Además de la asignación del presupuesto del 12.8 por ciento del PIB al desarrollo social.
En contraparte, apuntó, ese impulso socioeconómico se vio ensombrecido por el aumento previsto del déficit en 4.9 por ciento para el 2024.
Fue así como la propia proyección de inflación generó críticas al superar el punto de referencia del tres por ciento del Banco Central.
Esto a su vez, podría catalizar un incremento de las tasas de interés y en consecuencia, frenar la perspectiva de inversión y expansión económica, subrayó.
En ese sentido, Ricardo Monreal señaló que si bien predominaron los asuntos favorables internos, no se deben pasar por alto los acontecimientos externos más actuales.