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La exama de llaves de Guillermo Padrés, quien hasta el día de ayer permanecía en la cárcel por el robo de millones de pesos de la casa de gobierno en Sonora, denunció que, si algo le llega a pasar a ella o a su familia hace responsable a su exjefe, el exgobernador.
Gisela Peraza tiene una denuncia penal en contra de Padrés por abuso de autoridad, privación ilegal de la libertad y tortura. Según información de Excélsior, la mujer declaró que tiene miedo pues es como volver a vivir una película de terror; aseguró que se siente insegura sabiendo que Guillermo Padrés ahora se encuentra en libertad.
La exempleada estuvo recluida por varias horas en la residencia oficial del exgobernador de Sonora en donde se le acusó de haber robado siete millones de pesos y joyas que el exmandatario guardaba en su habitación. Razón por la que se le detuvo injustificadamente por cuatro años en el Centro de Rehabilitación Social de Hermosillo.
La CNDH informó que la mujer fue torturada en la propia casa de gobierno y privada de su libertad ilegalmente.
Fue hasta 2015 cuando la gobernadora Claudia Pavlovich tomo posesión, que se permitió la salida de la extrabajadora de Guillermo Padrés.
Ante la violación de sus derechos humanos, la exempleada presentó una denuncia penal contra Guillermo Padrés y a 20 colaboradores cercanos por los delitos de privación ilegal de su libertad, abuso de autoridad, lesiones y asociación delictuosa.
El abogado de Gisela falleció la semana pasada.
Con información de Regeneración, Sin Embargo y Milenio.