Leticia Maldonado Rebollo
Corresponsal de Acustik noticias
Xalapa, Ver., a 25 de febrero de 2018. A penas el pasado jueves 22 de febrero, la rectora de la Universidad Veracruzana (UV), Sara Ladron de Guevara, acaparaba los titulares de la prensa local, al deslindarse de su compañera académica e investigadora Rosío Córdova Plaza, quien declaró tener conocimiento de al menos 20 miembros de la comunidad universitaria que habrían sido secuestrados y jamás regresados.
Todo parecía indicar que la atención estaría en la mencionada investigadora, dada la naturaleza de sus declaraciones que incluso la llevaron a declarar ante la Fiscalía General Estado, el pasado viernes; pero no fue así, pues durante el fin de semana, fue revelado que, la Auditoría Superior de la Federación detectó desvío de recursos en el periodo 2011-2016, en 5 programas de la casa de estudios.
De estos cinco programas, el de Atención a Problemas Estructurales de las Universidades Públicas Estatales, el importe observado representó el 100% de la muestra auditada.
En el ejercicio de los recursos la máxima casa de estudios de los veracruzanos incurrió en inobservancias de la normativa, en especial de la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, generando un probable daño a la Hacienda Pública Federal por un importe de 551,513.3 miles de pesos, el cual representa el 23.6 por ciento del monto auditado.
De igual modo, la Universidad no enteró al SAT 547,697.7 miles de pesos por concepto de ISR y realizó pagos improcedentes por 3,627.9 miles de pesos por pagar a trabajadores durante su licencia sin goce de sueldo y por 187.7 miles de pesos por pagos posteriores a la baja del trabajador.
De lo anterior, la misma Sara Ladron de Guevara, también se deslindo, y se escudó en la deuda que la pasada administración estatal, mantuvo con la universidad, de tal modo que dejó en claro que se trata de “el mismo dinero que no nos llegó, ustedes saben que el adeudo que el gobierno tuvo con la universidad veracruzana significó que no pagáramos el Impuesto Sobre la Renta, y ahora la Auditoría Superior de la Federación observa que no pagamos el impuesto sobre la renta y esos dineros”.
Con lo que deja en claro que si en efecto, existen algunas deudas, no fueron responsabilidad directa de ella ni de la universidad como tal. Sino que es la consecuencia de un acto más del ex mandatario veracruzano, Javier Duarte de Ochoa, quien durante mucho tiempo, negó los recursos que por ley le correspondían a la UV.