Los fraudes y las estafas están a la orden del día y los adultos mayores son un blanco fácil debido a su poca familiaridad con el uso de las tecnologías, especialmente en el manejo de aplicaciones financieras en sus teléfonos celulares, expresó Elizabeth Mateos Hernández, coordinadora de la asociación parlamentaria Mujeres Demócratas.
En este sentido y ante el grave problema, la legisladora propuso campañas para difundir información a los adultos mayores acerca de los distintos tipos de fraudes de los cuales pueden ser víctimas.
Para llevar a cabo la propuesta legislativa, exhortó a las secretarías de Inclusión y Bienestar Social, la de Seguridad Ciudadana, ambas de la CDMX y las 16 alcaldías para que las lleven a cabo y con ello proteger las finanzas de las personas, en especial de los adultos mayores, quienes por su falta de cercanía con la tecnología los hace vulnerables a la delincuencia.
Mateos Hernández refirió que, a través del tiempo, el avance tecnológico ha permitido que los procesos, anteriormente realizados de manera manual, hoy se realicen de forma automatizada con la ayuda de teléfonos inteligentes mediante las aplicaciones bancarias, o como la creación de páginas web del gobierno, desde donde se realizan trámites y pagos de servicios.
Sin bien, la tecnología aporta avances en los procesos para gestionar y reducir tiempos y costos, también se han diversificado las formas de extorsión y fraude, donde, especialmente los adultos mayores son más vulnerables a este tipo de delitos, por lo que los estafadores se enfocan en este grupo social.
Es por ello, que la integrante de la Junta de Coordinación Política del Congreso Capitalino quiere disminuir el porcentaje de solicitudes de ayuda por extorsión y fraude que en 2021 alcanzó 30% de 12 mil 712 solicitudes de personas adultas mayores, de acuerdo al Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México.
Una de las estafas más comunes, explicó Mateos Hernández, es el llamado vishing que se basa en llamadas telefónicas, a través de las cuales se suplanta la identidad de alguna institución financiera o gubernamental y obtiene información personal y sensible de la víctima.
Otros tipos de fraudes son el robo de contraseñas, el acoso digital, la difamación y la suplantación de identidad en redes sociales, detalló.
Los adultos mayores son pilares de la sociedad y como tal, se les debe retribuir todo lo que en su momento hicieron por nuestras generaciones, “hoy nos toca a nosotros protegerlos de la delincuencia, de todo aquel que quiera aprovecharse de su vulnerabilidad como personas mayores”, finalizó Elizabeth Mateos.