Con el objetivo de garantizar el derecho a los espacios públicos de los habitantes y recuperar áreas verdes en la Ciudad de México, el Gobierno capitalino entregó la segunda etapa de rehabilitación del Bosque de San Juan de Aragón, Alcaldía Gustavo A. Madero, donde se invirtieron 88.3 millones de pesos para la sustitución de la red hidráulica y mobiliario, intervención del humedal, andadores, red de riego, así como para la creación de una Playa de Aves y una zona recreativa 100 por ciento incluyente.
La Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, resaltó que la presente administración capitalina tiene como propósito construir una Ciudad Innovadora y de Derechos, y por ello, el acercamiento del derecho al espacio público digno debe ser para toda la población para disminuir desigualdades.
“El espacio público para nosotros es un derecho y la mejora de los espacios naturales también necesariamente tiene que ser un derecho (…) por eso, estamos ‘Sembrando Parques’ en la Ciudad de México, invertimos en el Parque Ecológico de Xochimilco, en el Bosque de Aragón, en el Parque Cuitláhuac y en 12 parques que están siendo y están transformando a nuestra ciudad, porque el espacio público, el espacio natural es un derecho de los habitantes de la ciudad”, expresó.
Durante un recorrido por el Bosque de San Juan de Aragón con visitantes del lugar, Sheinbaum Pardo sembró un árbol de la especie trueno, visitó el humedal con forma de espiral que fue construido en colaboración con la Facultad de Química de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el Lago Mayor y la Playa de Aves.
Además, en compañía del alcalde de Gustavo A. Madero, Francisco Chíguil Figueroa, la mandataria capitalina destacó que en la demarcación ya se entregó la Línea 1 de Cablebús y se va a rescatar el Río de Los Remedios.
La secretaria del Medio Ambiente, Marina Robles García, indicó que el Bosque de San Juan de Aragón recibe aproximadamente 5 millones de visitantes al año, además de que en 20 años ha triplicado la cantidad de aves que habitan o que llegan a pasar una temporada en el sitio y en los últimos tres años alrededor de 35 especies de polinizadores se sumaron a los registros.
“Es un orgullo para esta región, y que vayamos mejorando cada uno de los espacios de estos refugios de biodiversidad que estamos abriendo en el programa “Sembrando Parques” y también en el programa de mejora de las Áreas Naturales Protegidas y las Áreas de Valor Ambiental de la Ciudad. Creo que es un orgullo para quienes vivimos en esta ciudad, que podamos gozar cada vez más de un ambiente más saludable por el bienestar de todas las personas”, dijo.
El secretario de Obras y Servicios, Jesús Antonio Esteva Medina, explicó que, en total, se invirtieron 206 millones de pesos en el Bosque de San Juan de Aragón; la segunda etapa contempló una rehabilitación de 38.6 hectáreas.
Las actividades que se llevaron a cabo en la segunda etapa son las siguientes: reposición de 27 mil 830 m2 de la carpeta asfáltica en el circuito principal, lo que representa 2 mil 610 m de longitud -agilizará el recorrido de bicicletas o triciclos-; se sustituyeron 618 metros (m) de drenaje, 2 mil 610 m de la red de agua potable y el reemplazo 548 m del sistema de agua tratada; y se recuperaron 12 mil m2 de áreas verdes permeables para la filtración de agua a las capas inferiores suelo.
También se construyó un sistema de riego de 200 aspersores con 2 mil m de longitud que regará con agua tratada una superficie de 240 mil m2; se instalaron 65 luminarias solares, las cuales se activan por fotoceldas para ahorrar energía y aprovechar la luz del día. En los puentes gemelos se rehabilitó una superficie de 600 m2, se colocaron ocho bolardos, se atendieron 240 m de barandal y se instalaron 300 luminarias que se encuentran distribuidas sobre el piso de ambos puentes.
Asimismo, se restauró el viejo humedal con la limpieza de 82 m en canales y en 160 tapas; se mejoró la reja perimetral de 366 m lineales con una altura de 2 m; se instaló una red de cable de cobre para alimentar bombas de 200 mililitros (ml) y se colocaron 96 baterías para brindar el apto funcionamiento en esta área.
Se construyeron 15 mil 200 m2 de andadores con adoquín alrededor del lago, con un andador perimetral de cuatro mil 350 m; se reubicaron 55 bancas y 10 botes de basura; y se rehabilitaron cuatro islas con velarias, se colocó adoquín en 555 m2 y se sustituyeron barandales. Asimismo, se habilitó una zona recreativa 100 por ciento incluyente de mil 120 m2 que cuenta con 14 módulos de juegos en un área de 652 m² con piso amortiguante de caucho, 400 m2 de concreto ecológico, se colocaron ocho bancas, cuatro bolardos, y se construyeron 60 m2 de rampas de acceso y 48 m2 de guarniciones.
Con el fin de proteger a las aves endémicas residentes y migratorias, se habilitaron mil m2 de superficie para la Playa de Aves, para lo que se utilizó grava, piedra braza y arena silica; se desplantó concreto en 103 m2, se colocaron cubresuelos en 100 m2 y se instaló una reja perimetral a lo largo de 2.5 metros de ancho por 85 metros de longitud.
La especialista de Avifauna de la Facultad de Estudios Superiores Iztacala de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Patricia Ramírez Bastida, explicó que la Playa de Aves y el humedal tienen una gran relevancia para la capital del país y las especies migratorias, ya que permite que lleguen al lugar patos, pelicanos, monjitas, charranes, chichicuilotes, avocetas, zambullidores, gallaretas, ibis, águilas pescadoras, entre otras.