Día Internacional del Tiburón Ballena
Hasta hace relativamente poco tiempo, tres décadas, al tiburón ballena (Rhincodon typus) se le temía por su gran tamaño, de 18 a 20 metros de envergadura, y su enorme boca, pero largos estudios comprobaron no sólo la inocuidad, sino la docilidad de esta carismática criatura marina que hoy es uno de los peces más buscados del mundo por el turismo de nado y observación, y es centro de importantes empresas ecoturísticas que obtienen ganancias millonarias de esa actividad.
Aunque en todo el planeta se reconocen alrededor de 30 sitios de agregación de tiburón ballena, como Qatar, a donde llegan poco más de 100 individuos, México es verdaderamente privilegiado pues tiene presencia frecuente del gran pez en todas sus costas, lo mismo sobre el Océano Pacífico que sobre el mar Caribe.
Pero la agregación de la especie ocurre principalmente al norte del Caribe mexicano, al noreste de la Península de Yucatán, entre Isla Contoy, Isla Mujeres e Isla Holbox, en el estado de Quintana Roo, uno de los sitios de mayor importancia a nivel global, a donde se han identificado fotográficamente al menos 1,100 tiburones ballena, la agregación más numerosa reportada en todo el mundo.
Algunas de estas zonas marinas se encuentran dentro de las Áreas Naturales Protegidas administradas por la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), como es el caso del Área de Protección de Flora y Fauna Yum-Balam, el Parque Nacional Isla Contoy, la Reserva de la Biósfera Tiburón Ballena, la Reserva de la Biósfera Bahía de los Ángeles, canales de Ballenas y Salsipuedes, la zona marina del Parque Nacional Archipiélago de Espíritu Santo y la Reserva de la Biósfera del Archipiélago de Revillagigedo.
Aunque el tiburón ballena es una especie solitaria, forma agrupaciones estacionales de algunos cuantos hasta centenares de individuos, según la disponibilidad de alimento. Estudios recientes han concluido que, además de consumir una gran variedad de organismos del zooplancton, también puede comer pequeños peces como sardinas, anchovetas y pequeños calamares.
Un tema que permanece en el misterio es la reproducción y apareamiento del tiburón ballena. En 1995 fue estudiada una hembra capturada en Taiwán cuyo vientre gestaba 304 embriones en distinto estado de desarrollo, con lo cual se supo que es una especie ovovivípara. Pero no se ha podido observar ni sus ritos de cortejo ni su apareamiento ni sus zonas de crianza que se supone son oceánicas y profundas.
Desde 2016 la especie Rhincodon typus está catalogada en Peligro de Extinción, según la lista roja de la Unión Internacional de Conservación de la Naturaleza, y como especie Amenazada), y enlistada en la Norma Oficial Mexicana 059 bajo la categoría de “Amenazada”, por lo cual la pesca del tiburón ballena es una actividad ilegal en todos los sitios de agregación de la especie,