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CDMX. 20 de septiembre de 2018.- Una investigación titulada ‘Estudio sobre Calidad de vida e impacto psicosocial de los y las habitantes de la Ciudad de México a un año del sismo del 19S’, hecha por el Colectivo de Investigación y Análisis Estratégico en Ciencias Sociales y Salud, junto con la Asociación Mexicana de Psicología Infantil, revela que los adolescentes de 13 a 17 años que viven en la Ciudad de México son el grupo de mayor riesgo por estrés postraumático después del sismo de hace un año.
Posterior a experimentar un desastre natural o estar en una situación de emergencia, en las personas se desata una serie de emociones que pueden derivar en traumas si no se tratan con un psicólogo. Las reacciones como el miedo, la angustia y la tristeza se generan casi naturalmente después de pasar por un momento crítico, por ello suele considerarse normal y no se le presta atención.
Habitantes de la #CDMX con trastorno postraumático a un año del #sismo: estudio ➡ https://t.co/e5z9MLKY9d pic.twitter.com/NRhx6s2yY3
— Grupo Fórmula (@Radio_Formula) September 20, 2018
El estudio antes mencionado fue aplicado a 845 personas de las 16 delegaciones de la Ciudad de México así como a personas que aunque no vivan en la capital estaban en el este lugar cuando sucedió el sismo.
Se encontró que más del 80 por ciento de los entrevistados de la Ciudad de México sintieron miedo y angustia ante el sismo del 19 de septiembre del año pasado. De ellos un 30 por ciento experimentó algún tipo de crisis nerviosa; solo el 1.28 por ciento recibió atención psicológica y psiquiátrica inmediata por medio de programas gubernamentales, el 7.03 por ciento recibió atención por parte de voluntarios y el 4.4 por ciento sufragaron los gastos para recibir atención psicológica en instituciones privadas.
La investigación revela la necesidad de estrategias integrales para la atención a víctimas, directas e indirectas, ya sean especialistas de diversas áreas que participaron en las labores de rescate así como a la ciudadanía en general. Los autores del estudio señalan que los procesos de reconstrucción no solo atañen a las casas y edificios sino que incluyen la recuperación emocional y mental de las personas que sufrieron el evento.
Con información de: Radio Fórmula, Huffington Post y El Sol de México.