La dignidad es irrenunciable; la complicidad, impensable y la impunidad no es negociable, sostuvo la secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde Luján, al señalar que el término del encargo de la fiscal general de Justicia de la Ciudad de
México, Ernestina Godoy Ramos, es motivo de reflexión sobre cuáles son los límites del cálculo político y qué se puede sacrificar para ejercer un cargo público o para mantenerse en él.
Al asistir al cuarto informe de labores que rindió Ernestina Godoy para informar sobre las acciones y avances alcanzados al frente de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX), la titular de Gobernación expresó que castigarle por investigar la corrupción, “ennoblece a quien hoy deja el cargo”.
En presencia del jefe de Gobierno, Martí Batres Guadarrama, Luisa María Alcalde aseguró que Ernestina Godoy será recordada por sus logros y contribución en la disminución de delitos de alto impacto y no tolerar feminicidios, así como por su valor, por enfrentar mafias de trata de personas y otras como el cártel inmobiliario, pero, sobre todo, por su dignidad, sacrificio para ejercer plena y dignamente su encargo.
La encargada de la política interna del país calificó a Ernestina Godoy como una compañera honesta, valiente y comprometida con las víctimas y la justicia.
En el Altar a la Patria, en la 1ª Sección del Bosque de Chapultepec, Ernestina Godoy reconoció el acompañamiento siempre solidario de la secretaria de Gobernación.
En el tema de búsqueda de personas, destacó la creación de la Unidad de Análisis de Contexto dedicada al estudio de los patrones de desaparición de personas, así como del grupo especial de búsqueda y reacción inmediata.
En ese tenor resaltó que la FGJCDMX fue pionera de la iniciativa que se implementa en el país para la búsqueda masiva de datos en registros administrativos, lo cual permitió establecer una metodología de trabajo para localizar a las personas que han sido reportadas en esta situación. “El gobierno federal está desplegando todo el esfuerzo con esta metodología que fue hecha desde la Ciudad de México”.
Indicó que la procuración de justicia es un asunto de la mayor trascendencia social, “y la ciudadanía debe saber quién está de cada lado”. Su labor al frente de la FGJCDMX -sostuvo- fue mejorarla, pero también atender mejor a quienes acuden a ella.
Subrayó que la fiscalía a su cargo significó una oportunidad única para “construir una verdadera institución al servicio de la justicia, una fiscalía a lado de las víctimas, con perspectiva de género, sin discriminación, con mejor atención y eficiente en la recepción de las denuncias; que investiga con profesionalismo y con rigor científico, que respeta los derechos humanos y combate todas las expresiones criminales con inteligencia y con firmeza”.
Asistieron al informe el fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero; la consejera jurídica del Ejecutivo federal, María Estela Ríos González; el magistrado presidente del Poder Judicial de la Ciudad de México (PJCDMX), Rafael Guerra
Álvarez; el jefe de Estado Mayor de la Primera Zona Militar, coronel de Infantería Diplomado de Estado Mayor, Jaime Salvador López Ruiz; el jefe de Estado Mayor de la Primera Zona Militar, coordinador general del Plan Marina en la Ciudad de México, capitán de Navío Cuerpo General Diplomado de Estado Mayor, Miguel Ángel Rosales Maldonado. Por parte del Gobierno de la Ciudad de México, los secretarios de Seguridad Ciudadana, Pablo Vázquez Camacho; y de Gobierno, Ricardo Ruiz Suárez.