En la tradicional celebración guadalupana del 12 de diciembre, el Estado de México cuenta con destinos de turismo religioso que permiten a las y los visitantes conocer sitios destinados a profesar la fe religiosa y descubrir la historia y cultura de la humanidad.
Asimismo, quienes son amantes del arte sacro, los recintos religiosos son un ejemplo de diferentes estilos que pueden apreciarse como el barroco, plateresco, neoclásico y colonial, entre otros.
En Toluca, las y los viajeros encontrarán la Iglesia de Santa María de Guadalupe ubicada en la esquina de José Vicente Villada y Plutarco González. La construcción data del año 1676 por las órdenes religiosas de Franciscanos y Juaninos.
Es en 1947 cuando se le considera el primer templo en la ciudad capital con adoración y veneración especial a la Virgen de Guadalupe y de ahí su nombre. La fachada de esta iglesia está compuesta por tres cuerpos en un estilo plateresco autóctono.
El Pueblo Mágico de El Oro alberga la Parroquia de Santa María de Guadalupe de estilo neoclásico y su construcción data de 1783, éste cuenta con muros de adobe y techos de teja española. En su origen se construyó sólo una torre y ya a mediados del Siglo XX se construyó la segunda.
En el Pueblo Mágico de Valle de Bravo se encuentra la Capilla de la Virgen de Guadalupe, remodelada a mediados del Siglo XX en granito y madera. Este recinto rinde culto a la Virgen los 365 días del año, con especial énfasis en la fecha de celebración y en su honor, se realizan diversos actos religiosos y se cantan las Mañanitas desde el amanecer.
El Santuario Diocesano de la Quinta Aparición de la Virgen de Guadalupe y Casa de los Dos Videntes se localiza en el municipio de Cuautitlán. Históricamente, en este lugar nació y creció Juan Diego, junto con su tío Bernardino, y en el cual refieren, se dio la quinta aparición de la Virgen de Guadalupe.
Ocuilan cuenta con el cuarto monumento religioso más grande de México y más grande del mundo, dedicado a la Virgen de Guadalupe. Se ubica en la comunidad El Ahuehuete, a ocho kilómetros del Santuario del Señor de Chalma.
Para llegar a la Virgen Monumental se deben subir 640 escalones y para llegar al mirador, que se encuentra en la cabeza del monumento, se deben ascender 760 escalones más. Quienes son creyentes toman esta visita como una penitencia para alguna petición y agradecimiento.