Hacer efectivo el derecho a la salud para todas y todos, impulsado por el gobierno de México, es prioridad del nuevo Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE). Por ello, “trabajamos a ras de tierra en la transformación integral de los servicios, fortaleciendo su equipamiento e infraestructura con recursos propios, para recuperar su capacidad resolutiva, humanismo y trato digno a los casi 14 millones de derechohabientes, quienes en la realidad son dueñas y dueños de este organismo”, enfatizó el director general, Pedro Zenteno Santaella.
En el marco del Día Internacional de la Cobertura Sanitaria Universal destacó que, actualmente, las personas jubiladas y pensionadas del instituto, las y los servidores públicos cotizantes, independientemente de su rango y sueldo, así como sus familiares directos, tienen acceso a la atención, desde preventiva, consulta médica general, familiar o de especialidad, de urgencias los 365 días del año, hasta partos, cirugía general y, en caso de requerirlo, tratamientos multidisciplinarios de alta especialidad.
Esta protección del seguro médico del ISSSTE cubre a derechohabientes durante su ciclo de vida, desde antes de nacer y hasta la vejez, e incluso brinda cuidados paliativos y de acompañamiento a pacientes y familiares en el momento de la muerte.
A través del modelo de salud preventivo, el ISSSTE promueve acciones de educación en autocuidado, basado en alimentación saludable y equilibrada, práctica regular de ejercicio en todas las etapas de la vida, planificación familiar, monitoreo del embarazo, chequeo médico anual para detección oportuna de enfermedades, especialmente las crónico-degenerativas y su principal factor de riesgo que es la obesidad, así como los tipos de cáncer de mayor impacto en mujeres —como el cervicouterino y de mama— y en hombres —de próstata—.
En este contexto, refirió que, de acuerdo con el Anuario Estadístico 2022, https://goo.su/KOeuK en ese año el instituto llevó a cabo diferentes acciones para hacer efectivo el derecho a la salud de las y los trabajadores del Estado y sus familias, además de jubilados y pensionados.
Explicó que, durante el año de referencia, en la red de mil 115 unidades médicas de los tres niveles de atención en el país se proporcionaron 20 millones 40 mil 350 consultas médicas generales y de especialidad; dos millones 30 mil 802 consultas de urgencias, de las cuales 665 mil 951 fueron reales y un millón 364 mil 851 sentidas, es decir, no ponían en riesgo la vida de las personas o la función de algún miembro u órgano de su cuerpo.
Se realizaron 47 millones 860 mil 514 estudios diagnósticos de laboratorio, radiología e imagen; se atendieron 23 mil 101 partos; 234 mil 636 cirugías y se registraron 318 mil 826 egresos hospitalarios.
A través del programa ECOS para el Bienestar, el instituto conformó 369 equipos comunitarios de promoción a la salud; llevó a cabo 11 mil 639 mil 28 acciones preventivas en beneficio de cinco millones 534 mil 656 personas y un millón 106 mil 932 familias.
Resaltó que el modelo de seguridad social del instituto es uno de los más completos e integrales del contexto internacional, pero estaba rebasado por el aumento de la demanda y el deterioro de sus instalaciones con antigüedad de 40 a 60 años, que por décadas estuvieron en el abandono y falta de mantenimiento.
Con el plan de rescate promovido por el presidente Andrés Manuel López Obrador, hoy se construyen con recursos propios seis unidades hospitalarias nuevas: el Hospital General (HG) de Tampico, Tamaulipas, de 150 camas censables; los Hospitales Regionales (HR) de Jalisco, Coahuila y Guerrero, de 250 camas cada uno; las Clínicas Hospital (CH) de Baja California Sur y Chiapas, de 20 camas cada una. Además, se ha fortalecido el equipamiento y se realizan obras de rehabilitación integral en clínicas y hospitales del país, con lo cual contribuimos a la universalidad de los servicios de salud, concluyó Pedro Zenteno.