La senadora Geovanna Bañuelos solicitó a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales y a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente intensificar las acciones de verificación en el cumplimiento de la Norma Oficial Mexicana NOM-141-SEMARNAT-2003; y atender de manera prioritaria las evaluaciones de impacto ambiental en proyectos que pretendan mejorar la seguridad estructural en presas de jales activas.
Mediante un punto de acuerdo presentado al Senado de la República la presidenta de la Comisión de Minería y Desarrollo Regional, pide además que se apliquen las sanciones y se establezcan las acciones necesarias para la remediación ambiental en las zonas afectadas por derrames en presas de jales ubicadas en el estado de Zacatecas.
Geovanna Bañuelos destacó que las presas de jales son estructuras para el almacenamiento o disposición final de los residuos generados en las operaciones primarias de separación y concentración de minerales.
Explicó que el tamaño y la capacidad de estos depósitos se expande según la producción, por lo que su construcción y operación ocurren al mismo tiempo; y, contrario a lo que se podría pensar, estas estructuras están diseñadas para retener sólidos, no líquidos, explicó la coordinadora del Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo.
No obstante, dijo, estas estructuras no están exentas de derrames y el grado de peligrosidad potencial de contaminación ocasionada por estos en presas de jales depende de tres factores: la toxicidad del residuo, el volumen almacenado y su ubicación geoespacial dentro de la cuenca.
“Las posibles fallas en este tipo de presas pueden comprometer actividades como la agricultura y la ganadería, afectando la seguridad alimentaria”, advirtió la senadora.
Geovanna Bañuelos señaló que la expansión de la minería en Zacatecas ha provocado el desplazamiento de comunidades agrícolas en Mazapil, así como otros problemas derivados de la contaminación de suelos.
De acuerdo con el Inventario Homologado Preliminar de Presas de Jales emitido por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, actualmente existen en México 585 presas de jales con diferentes estatus de operación: activas, inactivas, inactivas con posibilidad de reactivarse, temporales, inconclusas y desconocidas; de estas, un total de 65 (11%) se encuentran dentro de diecisiete Áreas Naturales Protegidas, 11 federales y 6 estatales.
Asimismo, otras 157 presas de jales están ubicadas a una distancia de entre 1 y 5 km de diversas áreas naturales protegidas; Durango, Chihuahua, Sonora y Zacatecas, son los estados con mayor número de presas de jales.
Geovanna Bañuelos informó que el 17 de abril de 2023 la Unidad de Transparencia de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente emitió la respuesta a la solicitud registrada bajo el folio 330024423000313, la cual señala que de acuerdo con información del Centro de Orientación para la Atención de Emergencias Ambientales (COATEA), en el periodo de 2000 al 2023 se han registrado 66 emergencias ambientales relacionadas con derrames en presas de jales.
“Es de destacar que Zacatecas ocupa el primer puesto con veinticinco casos, en los municipios de Mazapil, Concepción del Oro, Fresnillo, Sombrerete, Chalchihuites, Vetagrande y Morelos; seguido en el segundo sitio por Durango, con nueve de estos incidentes; Chihuahua, en el tercero, con ocho; en el cuarto lugar Guanajuato, con cinco casos; y en el quinto escaño Sinaloa, con tres casos”, informó.
En este sentido, la líder petista considera primordial garantizar el derecho humano a un medio ambiente sano y en específico, hacer cumplir la normatividad en materia de minería.
“Es necesario redoblar esfuerzos en la verificación e inspección de estas presas de jales, con el objetivo de certificar su seguridad estructural, así como impulsar las acciones necesarias para que los responsables cumplan con la reparación de los daños”, enfatizó.