La diabetes mellitus es el factor de riesgo más importante para la salud visual de la población adulta en México; por ello, el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste) promueve grupos de ayuda mutua en el primer nivel de atención y el programa Manejo Integral de Diabetes por Etapas (MIDE), donde se brinda orientación sobre autocuidado para el control del padecimiento y evitar complicaciones graves, como la ceguera, informó el director general, Pedro Zenteno Santaella.
A propósito del Día Mundial de la Visión, que se conmemora hoy, la oftalmóloga responsable del Programa de Trasplante de Córnea del Hospital Regional “Lic. Adolfo López Mateos”, Paulina Rentería Ruiz, destacó que en los pacientes con esta enfermedad crónica no transmisible la estructura que más se daña es la retina, enfermedad que se conoce como retinopatía diabética.
En segundo lugar está la catarata, que, aunque es una patología más frecuente en personas adultas mayores, los pacientes jóvenes con diabetes que no llevan control y tratamiento adecuado pueden desarrollarla a edades más tempranas.
Otro padecimiento de riesgo es el glaucoma, donde la presión intraocular se eleva demasiado y empieza a dañar el nervio óptico; es la primera causa de ceguera irreversible a escala mundial, de ahí la importancia de insistir en el monitoreo médico periódico, para contar con un diagnóstico oportuno y no llegar a la pérdida total de la visión, enfatizó la especialista.
Respecto a la población juvenil, la oftalmóloga del Issste señaló que es común el uso de gotas que contienen medicamentos esteroides para tratar enrojecimiento de ojos por desvelo, consumo de sustancias o irritación, lo cual es un factor de riesgo poco conocido, pero importante. “No es correcto usarlas, porque a largo plazo pueden contribuir a desarrollar glaucoma, una enfermedad seria donde el paciente puede perder la visión”.
Otra causa común de enfermedades e infecciones oculares graves en adolescentes es usar lentes de contacto con graduación y de tipo estético; recomendó no utilizarlos, ya que no es necesario. En caso de que exista prescripción médica, es importante asegurarse de cumplir las medidas de higiene y conservación recomendadas.
Las y los pacientes que viven con diagnóstico de diabetes mellitus deben intensificar el autocuidado con buenos hábitos de alimentación y estilo de vida para evitar complicaciones.
Además, recomendó acudir a las unidades médicas para solicitar revisión oftalmológica periódica, específicamente del fondo de ojo —lo que incluye sus capas internas, es decir, la retina y el nervio óptico—, con el fin de evitar complicaciones como retinopatía diabética, que también puede detectarse a tiempo y recibir tratamiento para impedir la pérdida de la capacidad visual.
En el Día Mundial de la Visión, la especialista recalcó la importancia de que cada persona tome en sus manos la responsabilidad de su salud y destacó que, en las unidades médicas del Issste y los servicios de oftalmología, los derechohabientes tienen aliados para orientar y apoyar con diagnóstico oportuno y tratamiento.