Con la resolución sobre la integración del INAI, la Suprema Corte de Justicia de la Nación usurpó funciones del Poder Legislativo y se colocó como un “suprapoder conservador” que violenta el principio de división de poderes, advirtió el doctor Ricardo Monreal.
Recordó que los ministros cuentan con medios de apremio para insistir que se cubra la omisión del Senado en el nombramiento de los comisionados del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales, pero no puede sustituir a este órgano del Congreso de la Unión.
Ayer, con tres votos a favor y uno en contra, la Segunda Sala de la SCJN avaló que el Instituto pueda sesionar legalmente con cuatro comisionados de los siete que integran el pleno.
En entrevista, Monreal señaló que no obstante que él se expresó en su momento porque el Senado cubriera las vacantes en el INAI, con la decisión de los ministros, la Corte usurpa funciones que no le corresponden, pues sustituyó a la Cámara y decidió como si fuera parte del Poder Legislativo.
Dicha determinación, enfatizó, constituye una invasión de poderes, aquí y en cualquier país que tenga un sistema de división de poderes.
La Suprema Corte de Justicia de la Nación, acotó, está en un mal momento, porque se ha excedido en sus resoluciones y todos los días está en una “confrontación torpe” con el Presidente de la República.
Incluso, alertó, el ministro Luis María Aguilar Morales había preparado un proyecto para separar del cargo al titular del Ejecutivo federal y consignarlo, porque no envió al Senado la ratificación de una magistrada del Tribunal Federal de Justicia Administrativa.
Con ello, insistió Ricardo Monreal, se observa un ánimo de revancha de la Suprema Corte contra el Presidente, pues “resuelven en tres días esto”, pero tardan un año en resolver un tema que les interesa a los mexicanos, que es el pago de impuestos de las empresas.
“Tiene razón el presidente en sentirse agraviado por los actos” de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Ricardo Monreal refrendó su llamado para que los ministros rechacen sus 40 privilegios que tienen, o cuando menos revisen sus altos salarios y sus prestaciones.
“Lo que deberían de hacer es renunciar a sus privilegios y convertirse en ciudadanos, con un salario normal, que revisen su cúmulo de privilegios que son una ofensa a la sociedad, y con lo que se colocan como una casta dorada, privilegiada y nadie los toca”.
“Para mí no representan más que una casta, que ahora están sustituyendo al Poder Legislativo y que lamentablemente les aplauden por cometer estos excesos”.
Ricardo Monreal consideró que los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación deben tener una actitud discreta, cumplir con su función con sigilo e inteligencia, pero ahora “les encante ser protagonistas”, ufanarse de sus resoluciones y hacer debates en los medios.
“Lo que ahora hizo la Corte a mí no me alegra, me preocupa que se erija en un supremo poder conservador”, expresó.