Con la bienvenida a una nueva generación de estudiantes y el reconocimiento a las y los docentes, trabajadores, egresados y exdirectores que han hecho posible la continuidad de un proyecto académico comprometido con las problemáticas sociales del país, dieron inicio las conmemoraciones por el 85 aniversario de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH).
Diversas generaciones se dieron cita en el Museo Nacional de Antropología (MNA), recinto que fue sede del centro educativo entre 1964 y 1978, para augurarle larga vida, deseo al que se sumó la secretaria de Cultura del Gobierno de México, Alejandra Frausto Guerrero, quien reconoció en esta institución un importante semillero de profesionales que han velado y velarán por el patrimonio cultural de la nación.
El pasado de nuestro territorio, dijo, está latente en las comunidades indígenas, afrodescendientes y mestizas, “que ahora son el centro de la transformación que vivimos. Y es justamente en la ENAH donde se enseña el amor a lo más profundo del ser nacional. Nunca más, el estudio de la cultura, a través de disciplinas como la antropología y la historia, será accesorio”.
Vía remota, el director general del INAH, Diego Prieto Hernández, dio la bienvenida a la nueva generación, “a un espacio de libertad, pensamiento crítico, compromiso social, estudio disciplinado y tenaz de los fenómenos sociales y culturales del país y del mundo.
“Desde ese ejercicio crítico, científico y popular de la antropología es que la ENAH deberá enfrentar este momento crucial en su devenir, donde se encamina a una redefinición para dar respuesta a los grandes problemas del país y de la humanidad: desigualdad, violencia, inseguridad, migración, desigualdad de género, racismo, clasismo y la catástrofe ecológica. Las diversas disciplinas que imparte en licenciaturas y posgrados contribuyen a generar cuadros que se harán cargo del análisis de estas problemáticas. Por ello, hago votos para que entre a una etapa de fortalecimiento y reconfiguración, y permanezca cercana al desarrollo de la ciencia y a los reclamos de la sociedad mexicana”, manifestó el antropólogo.
En su intervención, el rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Enrique Graue Wiechers, también felicitó a la ENAH, institución que considera “un pilar insustituible para que la educación superior cumpla con la enorme responsabilidad de investigar, proteger y difundir el patrimonio sociocultural de nuestros pueblos y naciones”.
A su vez, el investigador emérito del INAH, Eduardo Matos Moctezuma, reiteró el agradecimiento que dio hace unos meses, al recibir el Premio Princesa de Asturias de Ciencias Sociales, en el que puso en primer lugar a la ENAH, en cuyas aulas se formó al lado de grandes nombres de la antropología mexicana y mundial, y que significó su andar en el INAH, institución a la que ha entregado lo mejor de su obra.
El arqueólogo, quien dirigió la ENAH entre 1971 y 1973, enlistó a 10 investigadores formados en la ENAH, reconocidos con el Premio Nacional de Ciencias y Artes: Santiago Genovés Tarazaga, Ignacio Bernal y García Pimentel, Pablo González Casanova, Román Piña Chan, Rodolfo Stavenhagen Gruenbaum, Margarita Nolasco Armas, Roger Bartra Murià, Antonio García de León Griego, Salomón Nahmad Sittón y él mismo.
El director de la ENAH, José Luis Castrejón Caballero, puntualizó que estos 85 años de la institución también marcan su porvenir, en el contexto de un México muy distinto al de 1938. En esta segunda década del siglo XXI, expuso, se presentan diversos retos para el centro educativo y de investigación como la actualización de los planes de estudio de licenciatura y el fortalecimiento de los posgrados. A su vez, la coordinadora nacional de Difusión del INAH, Beatriz Quintanar Hinojosa, dedicó un discurso a las y los estudiantes de nuevo ingreso y les exhortó a “refrendar el compromiso con la formación humanista y con un país que necesita de la ENAH para enaltecer su grandeza y transformar su futuro”.
Finalmente, el secretario Técnico del INAH, José Luis Perea González, reconoció en su gente y en sus egresados el mayor valor de la ENAH y dijo que en el seno de la misma institución está su talento para repensarse, adaptarse e innovar en cada una de las disciplinas donde se especializan sus estudiantes y en sus capacidades para abordar los retos y coyunturas de los procesos culturales de la actualidad. Como cierre de la ceremonia, se hizo entrega de reconocimientos a exdirectores de la ENAH, así como a docentes de asignatura y de tiempo completo, egresados destacados y trabajadores.