En México urge impulsar políticas públicas para que personas con discapacidad puedan encontrar un empleo productivo y puedan realizarse profesionalmente, expuso Ricardo Monreal.
De visita en Durango, a donde acudió para realizar asambleas informativas con diferentes sectores, el aspirante a coordinador de los Comités de Defensa la Cuarta Transformación, insistió en que hay que tomar en cuenta la diversidad de esas personas, su preferencia y, además, de manera transversal e interseccional a todo el Estado y la Administración Pública Federal.
Es un tema fundamental de derechos humanos, opinó el político zacatecano, tras subrayar que de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, “más de mil millones de personas viven en todo el mundo con alguna forma de discapacidad; de ellas, casi 200 millones experimentan dificultades considerables en su funcionamiento”, lo que representa el 15% por ciento de la población mundial, la mayor minoría del mundo.
Monreal Ávila destacó que esto se verá agravado dado que la población está envejeciendo y el riesgo de discapacidad es superior entre los adultos mayores. En los países donde la esperanza de vida es mayor a 70 años, 8 años transcurren con discapacidades.
En México, según el Censo 2020, aseveró, hay casi 21 millones de personas con alguna limitación para hacer alguna actividad de la vida cotidiana -que no enfermedad- (como vestirse, subir y o bajar escaleras, o visuales), lo que representa el 16% de la población.
Hay que tener presente que es una población muy diversa que enfrentan distintos tipos de barreras: personas con discapacidad motriz, visual, auditiva, intelectual, neurodivergentes (como personas con autismo, aunque algunas personas con autismo no se consideran PCD) y personas con discapacidad psicosocial, es decir aquellas personas usuarias o exusuarias de servicios de salud mental que enfrentan situaciones emocionales complejas y requieren apoyos.
Ricardo Monreal mencionó que el mayor número de PCD tienen discapacidad psicosocial, sobre todo depresión. La Organización Mundial de la Salud destacó que durante el primer año de la pandemia la prevalencia mundial de la ansiedad y depresión aumentó 25%. Afectó más a mujeres que a los hombres y a los jóvenes entre 20 y 24 años.
Explicó que de acuerdo con el Informe Mundial sobre Discapacidad los obstáculos que se enfrentan son, entre otros:
“Políticas y normas insuficientes. La formulación de políticas no siempre tiene en cuenta las necesidades de las personas con discapacidad, abundó.
También actitudes negativas. Señalo que según la ONU, las creencias y prejuicios constituyen obstáculos para la educación, el empleo, la atención de salud y la participación social.
Otro tema es la prestación insuficiente de servicios. Las personas con discapacidad son particularmente vulnerables a las deficiencias que presentan los servicios tales como la atención de salud, la rehabilitación y la asistencia y apoyo.
Así como la financiación insuficiente. Los recursos asignados a poner en práctica políticas y planes son a menudo insuficientes, precisó.
Y la falta de accesibilidad. Ricardo Monreal destacó el informe referido hace mención de que muchos edificios y sistemas de transporte resultan inaccesibles lo que es un motivo habitual que desalienta a las personas con discapacidad a buscar trabajo o que les impide acceder a la atención de salud.
Ante ello sostuvo que cualquier política pública debe entender el nuevo paradigma planteado en la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad que ratificó el Senado de la República en el 2008, finalizó.