Como parte de las tareas que desarrolla la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), para la recuperación del patrimonio cultural dañado por el sismo del 19 de septiembre de 2017, se llevó a cabo una visita de obra con representantes del gobierno de Hungría para revisar el avance en la restauración de los espacios atriales del Ex Convento de Nuestra Señora de la Natividad.
En el encuentro, la secretaria de Cultura del Gobierno de México, Alejandra Frausto Guerrero, recordó que en 2020 se firmó un acuerdo con la Embajada de Hungría para unir experiencia, técnica y recurso económico en favor de este patrimonio religioso. “Hoy, ese gesto amable ve sus resultados y representa un mensaje de esperanza para Tepoztlán y la vida cultural de nuestro país”. A su vez, el ministro de Asuntos Exteriores y Comercio Exterior de Hungría, Péter Szijjártó, expresó que su nación tiene una tradición cristiana de más de mil años, por ello, conocen la importancia de los recintos católicos para un pueblo como México. El gobierno húngaro, sostuvo, continuará con su política de ayudar a los pueblos cristianos del mundo.
Acompañados del embajador de Hungría en México, Zoltán Németh; el secretario técnico del INAH, José Luis Perea González, en representación del director general del instituto, Diego Prieto Hernández; el gobernador de Morelos, Cuauhtémoc Blanco Bravo; el presidente municipal de Tepoztlán, David Demesa Barragán, y el párroco Martín Paredes Apolinar, la secretaria de Cultura federal y el ministro húngaro realizaron un recorrido por los espacios que han sido intervenidos en el conjunto conventual.
Posteriormente, develaron una placa que atestigua la cooperación entre los gobiernos de México y Hungría, en favor de la recuperación de esta edificación conventual del siglo XVI, la cual, junto con otros 14 monumentos de este tipo, está inscrita en la Lista del Patrimonio Mundial, de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura. La atención del monumento histórico se ha desarrollado en dos etapas: la primera, orientada a la recuperación estructural del inmueble, y la segunda, destinada a la restauración de los bienes muebles asociados al recinto.
La intervención arquitectónica, a cargo de dos empresas ganadoras de las licitaciones y bajo la supervisión de la Coordinación Nacional de Monumentos Históricos y del Centro INAH Morelos, se centró en la recuperación y conservación de los arcos de acceso del conjunto conventual, las capillas posas 2, 3 y 4, los muros atriales, la capilla abierta, la portada del templo, la cruz atrial y las pilas bautismales.
Entre las tareas ejecutadas destaca la reparación de caballetes de los muros atriales y la consolidación de las bardas por medio de inyección, remamposteo y reposición de áreas faltantes. En tanto, en la atención de los bienes muebles asociados al recinto, efectuada por especialistas de la Coordinación Nacional de Conservación del Patrimonio Cultural del INAH, se intervino la pintura mural plasmada en la barda poniente, las capillas posas, la capilla abierta, la pila bautismal y la portada del templo.
Las tareas continuarán en detalles en la capilla posa 4 y en la capilla abierta, en las cuales se realizó un trabajo de reconstrucción. En la primera se hará restitución de faltantes y en la segunda se trabajarán la fachada, las columnas y la techumbre.