La senadora Geovanna Bañuelos llamó a la Secretaría de Gobernación, al Sistema Nacional de Desarrollo Integral de la Familia, al Instituto Mexicano de la Juventud a fortalecer e incrementar los mecanismos de política demográfica enfocados en la planeación familiar, con el objetivo de que niñas, niños y adolescentes conozcan las consecuencias de contraer matrimonio antes de la mayoría de edad.
Mediante un punto de acuerdo presentado ante el Pleno del Senado, a nombre propio y de las senadoras Cora Pinedo Alonso, Martha Márquez y el senador Joel Padilla, la coordinadora del Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo también recomendó la elaboración de campañas de información que den visibilidad a la problemática del matrimonio infantil y expongan los graves efectos que tiene en el desarrollo y vida de los menores de edad.
Asimismo, pidió a la Secretaría de Salud y al Instituto Mexicano de la Juventud redoblar esfuerzos con el objetivo de garantizar el acceso a los servicios de salud sexual, reproductiva y a la planeación familiar a niñas, niños y adolescentes en todo el país.
Geovanna Bañuelos señaló que a pesar de que el matrimonio infantil está prohibido, México ocupa el octavo lugar mundial con la mayor cantidad de niñas y adolescentes casadas o en unión libre con más de un millón 420 mil menores en esta situación.
“Desafortunadamente, la realidad es que, aunque estén prohibidos y las cifras oficiales confirman que disminuyeron estos en el país, las cifras no son acordes a la realidad. En la actualidad se han dejado de enlistar los casamientos infantiles en el registro civil y existen otras situaciones donde se toma la decisión de esperar a la mayoría de edad para poder llevar a cabo la ceremonia”, mencionó.
La legisladora por Zacatecas señaló que una de las causas principales de que se presente esta situación tiene que ver con el estado de vulnerabilidad de la infancia mexicana que, en su mayoría, vive un entorno de violencia en el periodo de adolescencia hasta la mayoría de edad.
De acuerdo, con información del INEGI, en 2021, en 43 matrimonios, al menos una de las personas contrayentes era menor de edad. Estos casos se registraron en 12 entidades federativas.
En el país, las mujeres residentes de localidades rurales son las propensas al matrimonio infantil, pues 42.2% del total lo contrajeron siendo menores de edad, casi el doble comparado con aquellas que viven en localidades urbanas, que es de 26.4%, según datos recabados por el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres).
Guerrero con 45.6%; Chiapas con 42.1%; Tabasco, 41.1%; Campeche, 39.6% y Michoacán con 37.7% se posicionan como los estados donde existe una mayor cantidad de mujeres que contrajeron matrimonio antes de la mayoría de edad.
“Tristemente, estos matrimonios son más comunes en las niñas y adolescentes, como resultado de la desigualdad de género. En nuestro país, sobre todo en comunidades indígenas, es ‘normal’ la venta o los arreglos de matrimonio en las niñas y adolescentes, ya que es una ‘tradición’”, detalló Geovanna Bañuelos.
Por lo anterior, la líder petista considera que las autoridades deben tomar acciones encaminadas a fortalecer el empoderamiento y autonomía de las niñas, niños y adolescentes, así como el acceso a los servicios de salud sexual, reproductiva y a la planeación familiar, impulsar y ejecutar campañas para dar visibilidad, concientizar y prevenir el matrimonio infantil.
“En el Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo seguiremos luchando para y por las niñas, niños y adolescentes de nuestro país, para que no les arrebate su infancia y crezcan en un entorno sano, libre y sobre todo seguro, para que no sean violentados y desarrollen su personalidad y futuro libremente. Ellas y ellos son el presente y futuro de nuestro país”, concluyó.
El punto de acuerdo fue turnado a la Comisión de Gobernación para su análisis y posterior dictamen.