Una de las figuras más destacadas de las letras mexicanas, sor Juana Inés de la Cruz, inspiró a la propuesta coreográfica que describe aspectos clave del personaje e incorpora fragmentos de algunas de sus obras poéticas.
Se trata de la pieza Sor Juana Inés-erudita pasión, creada por la maestra Silvia Unzueta y que su compañía Púrpura Danza Teatro lleva al Teatro de la Danza Guillermina Bravo del Centro Cultural del Bosque, del 20 al 23 de octubre (jueves y viernes, 20:00 horas; sábado, 19:00, y domingo, 18:00 horas), en el marco de la temporada Memorias corpóreas, organizada por la Coordinación Nacional de Danza del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal).
En el marco de la estrategia #VolverAVerte de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, la maestra Unzueta explica que su coreografía surge del interés personal por la famosa escritora novohispana en analogía con la obra literaria Sor Juana Inés de la Cruz o las trampas de la fe, de Octavio Paz, un ensayo de carácter histórico, sociológico, literario y biográfico; dicho texto sirvió a la creadora como fuente de inspiración para el tratamiento escénico de tres aspectos de Juana de Asbaje.
Miembro del Sistema Nacional de Creadores, Silvia Unzueta considera que la peculiaridad de su propuesta es el tratamiento del personaje, representado con una simbología en los gestos y movimientos que une a los tres solos y se vuelve una obra redonda. Asimismo, exalta la música del son veracruzano compuesta por el grupo Los Parientes, relacionada con los versos de sor Juana Inés de la Cruz, que crea un sincretismo particular de la época.
La merecedora del reconocimiento “Una Vida en la Danza” expresó que la obra, “más que dar a conocer a sor Juana, pretende darla a sentir, así como crear una analogía con el poder femenino en una época de oscurantismo y que también la conecta con una realidad que permea la actualidad con relación a las mujeres en una sociedad patriarcal y machista”.
En Sor Juana Inés-erudita pasión el espectador se confrontará con los momentos de tribulación y contradicción que caracterizaban a la Décima musa, y con fragmentos de sus obras poéticas que describen las particularidades de cada solo, utilizando las analogías y simbolismos de su obra literaria, así como las reflexiones de Octavio Paz. Son tres solos, unidos por transiciones que representan “el enigma de la monja mexicana, su conflicto, pasión y lucha por la defensa de los derechos de la mujer, el derecho al conocimiento y el saber, en una época de oscurantismo”.
Finalmente, Silvia Unzueta aseguró que este espectáculo es especial para su compañía Púrpura Danza Teatro, ya que se han dedicado al tratamiento, investigación y representación de diversos personajes icónicos, como Agustín Lara en Rapsodia en rojo; La Llorona, que llegó a las 100 representaciones en el Museo de El Carmen, y Heterónimos, la cual giró alrededor del poeta Fernando Pessoa, entre otras piezas.
A más de 30 años de su creación y bajo la dirección de la maestra Unzueta, Púrpura Danza Teatro es una de las agrupaciones artísticas que ha trabajado con el interés de fusionarse con otras disciplinas. La compañía se inserta en esta corriente, en la búsqueda de recursos que dieran mayor expresión a los contenidos mediante un lenguaje escénico multidisciplinario, un multigénero que se define como danza teatro. En sus proyectos explora la vinculación de la emoción, el texto y el movimiento, lo cual define el sentido y la secuencia de las obras de su repertorio.