Cada persona en el mundo tiene el poder de hacer un cambio para reducir el calentamiento global y tener una vida más sustentable, tomando decisiones correctas e informadas sobre los productos y bienes que consumimos, consideró José Sarukhán Kermez, exrector e investigador emérito de la UNAM, y coordinador nacional de la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio).
Durante la inauguración en formato presencial del Festival de Arte y Ciencia El Aleph 2022. Las fronteras del medio ambiente, el científico ofreció la charla “Cambio ambiental global: retos y posibilidades”, en la que dijo: “Hemos perdido esa conexión con la naturaleza que era perfectamente innata, pero la vamos perdiendo a medida que no la reflexionamos, que no la vemos, y esto produce una serie de problemas ecológicos”.
Lo que sí podemos modificar, prosiguió, son los sistemas de desarrollo, pero a veces me da la impresión que es más fácil cambiar la ley de la gravedad que los intereses económicos, de ganancia y de poder; algo que debemos cambiar.
Tras explicar cómo es que el cambio climático, la deforestación y pérdida de la biodiversidad en la Tierra, así como la vida industrializada, han llevado a la generación de pobreza extrema y alta demanda de energía fósil, el también integrante de El Colegio Nacional agregó que la pandemia que enfrenta el mundo es un claro ejemplo de las consecuencias de las acciones humanas.
Se calcula que a partir de la aparición del ser humano, han vivido 108 mil millones de personas. Nosotros, 7.6 mil millones de habitantes, representamos 7 por ciento de ellas con vida, detalló el biólogo.
Recordó que si se quisiera ofrecer a la población mundial una calidad de vida equiparable a la de Estados Unidos, necesitaríamos tres planetas Tierra; si mantenemos la situación actual, para 2050 se requerirán ocho, los cuales, evidentemente, no tenemos.
Momentos antes, la coordinadora de Difusión Cultural de la UNAM, Rosa Beltrán Álvarez, enfatizó que la pandemia nos enseñó que no se puede vivir sin los otros, y sin el planeta, por lo que urge hacer una reflexión sobre este tema.
“Este festival aborda tres ejes: la crisis planetaria, pensarnos como planeta y acciones y medidas para regenerar nuestro entorno; analizando problemas del cambio climático, la contaminación, la sustentabilidad, energía, agua y alimentación, y el desbordado crecimiento industrial en las ciudades”, expuso.
A su vez, la directora del Instituto de Biología (IB) de la UNAM, Susana Magallón Puebla, dio la bienvenida a los jóvenes y profesores asistentes a la sala Miguel Covarrubias para el inicio de las actividades del Festival, que se llevarán a cabo en el Jardín Botánico, el Pabellón Nacional de la Biodiversidad y en el IB.
“Qué mejor manera de hacerlo presencial, aprovechando las múltiples instalaciones que tenemos en esta maravillosa Ciudad Universitaria, en particular, del Instituto de Biología que es una entidad emblemática en el estudio de la biodiversidad y el medio ambiente”, manifestó.
El secretario técnico de Planeación y Programación de Cultura UNAM, Juan Ayala Méndez, agradeció el interés en las 173 actividades durante 11 días que durará el encuentro.