Don Pablo González Casanova es un ser ejemplar, un académico sin tacha, un hombre que influyó determinantemente en la vida democrática de nuestra nación; es también un firme opositor a las injusticias y un universitario íntegro y cabal.
Así lo afirmó el rector Enrique Graue Wiechers, al encabezar la ceremonia híbrida con motivo del centésimo aniversario del exrector e investigador emérito Pablo González Casanova. “Son 100 años de una vida plena de la que todas y todos los mexicanos debemos sentirnos muy orgullosos”.
En el acto en el que participaron a distancia los exrectores de esta casa de estudios: José Sarukhán Kermez, Francisco Barnés de Castro y José Narro Robles, el autor de La democracia en México manifestó su beneplácito por la celebración, en la que se pronunció porque la Universidad, gobierno y sociedad civil atiendan los viejos dolores de los pobres y los nuevos problemas que les acarrea la industrialización.
El CCH significó abrir las puertas a la educación a decenas de miles de estudiantes y el Sistema de Universidad Abierta permitió incrementar los alcances educativos hacia una franja aún mayor de población. “Don Pablo nos demostró que las innovaciones y las alternativas educativas son posibles en nuestra casa de estudios, gracias a la pluralidad, diversidad y heterogeneidad que nos caracterizan”, subrayó.
De igual forma, Graue recalcó que sin los cimientos establecidos por González Casanova hubiera sido imposible enfrentar la actual crisis pandémica y el tránsito escolar de la totalidad de alumnas y alumnos de nuestra casa de estudios a la educación a distancia.
El rector de la UNAM apuntó las convicciones de don Pablo González Casanova, su férrea defensa de la autonomía y su firmeza de carácter, así como la dignidad que siempre le ha caracterizado, y por no claudicar. “Muchas gracias por su inmejorable ejemplo”.
Previamente, la coordinadora de Humanidades, Guadalupe Valencia García, se refirió al ex-rector de la UNAM como un “creador de instituciones, referente moral de todas y todos los universitarios en México y el mundo”, y como su querido y admirado maestro.
“En diferentes tiempos ha marcado, con su pensamiento y obra, una buena parte del derrotero intelectual de la sociología y las humanidades”, expresó.
Señaló que su obra La democracia en México, así como sus estudios de técnica social, sobre la explotación, el Estado y los partidos políticos, el imperialismo y la liberación, las luchas emancipatorias de los pueblos son temáticas fundamentales en las que González Casanova deja huella y una tradición intelectual.