Al conmemorar el Día Internacional de la Mujer Indígena, el Consejo Estatal para el Desarrollo Integral de los Pueblos Indígenas del Estado de México (CEDIPIEM), organismo sectorizado a la Secretaría de Desarrollo Social, reconoció el papel que las mujeres de los pueblos originarios y migrantes de la entidad realizan para mantener, promover y difundir la riqueza de sus raíces.
Al respecto, la Vocal Ejecutiva del CEDIPIEM, Diana Pérez Barragán, sostuvo que el Gobierno del Estado de México impulsa de manera permanente, espacios para visibilizar y destacar la trascendencia que tiene la mujer indígena para el desarrollo de sus comunidades.
“Hablar del papel de la mujer en el entorno indígena, es hablar del primer contacto con la lengua materna, con la gastronomía, con la cultura y con la educación, es a través de sus manos y sus palabras que las nuevas generaciones crecen y cultivan saberes, tradiciones y valores, casi siempre de forma anónima, callada, pero no por eso deja de ser trascendental”, resaltó.
En el marco de la celebración por el Día Internacional de la Mujer Indígena, organizado por el CEDIPIEM, Pérez Barragán recordó que la administración estatal encabezada por el Gobernador Alfredo Del Mazo Maza, ha impulsado espacios para que este núcleo social pueda participar en acciones que mejoren su calidad de vida.
Por ello, refrendó el compromiso asumido para hacer de las políticas públicas un ejemplo de igualdad y equidad, en donde la lucha por el respeto y la igualdad de condiciones sea un ejercicio permanente de las acciones de gobierno.
Durante esta conmemoración, se pusieron en marcha 18 talleres culturales que se realizarán en diversos municipios de la entidad, como cocina tradicional y lengua materna, en la que mujeres indígenas serán las instructoras.
Se estima que, en México, alrededor del 40 por ciento de las y los integrantes de los pueblos originarios, sufren alguna carencia y son las mujeres y niñas quienes viven estos efectos con mayor vulnerabilidad.
De ahí la importancia de abrir más espacios para quienes, por su rol de madres y educadoras, son las principales gestoras culturales y el primer contacto con la lengua y la cosmovisión indígena en sus comunidades.