Luis Bello | Acustik Noticias
Hace unos meses, la imágen de un niño estudiando bajo la lámpara de una banqueta, porque su casa no cuenta con energía eléctrica, se viralizó en redes sociales y medios de comunicación. El video llegó hasta los ojos de un empresario árabe quien, movido por la ternura del menor por cumplir con sus obligaciones escolares, viajó a Sudamérica para conocer de cerca al protagonista de esa nota y de paso mejorar la situación en la que vive.
El joven estudiante responde al nombre de Víctor Angulo y pertenece a la Municipalidad de Moche en la Provincia norteña de Trujillo, Perú. Cursa el sexto grado de la educación primaria y fue la emisora RPP Noticias la encargada de revelar la situación en la que estudian miles de niños en Latinoamérica.
Yusuf Ahmed Mubarak, es un empresario chocolatero de origen bahreiní dispuesto a contactar al menor, luego de conocer su historia. El pidió a su asesor y amigo, Gilberto Rosas Landa, buscar al estudiante en cada región de Perú.
Rosas Landa al ser mexicano tenía más conocimientos de la región así que contactó a la oficina del Ministerio de Educación Peruano para saber si conocían la historia del pequeño, sin embargo, respondieron que no tenían conocimiento del caso. Tras el fallido intento de obtener ayuda de las autoridades correspondientes, se trasladó hasta Perú donde inició una exhaustiva búsqueda y por fin dio con el director de la escuela Ramiro Aurelio Ñique Espíritu, centro escolar donde estudia Víctor.
Con el menor localizado, el mexicano ayudó a su amigo a tramitar una visa para poder viajar a Perú. Ya estando del otro lado del continente asiático, Yusuf constató la forma de vida tan limitada de Víctor y su familia. Allí se comprometió en hacerle una casa de dos pisos y un negocio para su madre, además de reconstruir su escuela e implementar un moderno laboratorio de computadoras con acceso a internet.
A pesar de las buenas intenciones del empresario árabe, Rosas Landa explicó las trabas puestas por las autoridades, según ellas ya se tiene asignado un presupuesto para la reconstrucción y si ellos construyen algo en el inmueble escolar, se verían obligados a tirar cada ladrillo. La escuela fue duramente golpeada, en días pasados, por el fenómeno del niño costero.
En tanto, la donación económica debe pasar por un proceso burocrático, en él debe asentarse el nombre del donante, a qué institución va dirigido o su fin, entre otras atenuantes. Deben esperar un cierto periodo para saber si procede o no, dificultando la acción altruista de Gilberto y Yusuf pues ambos deben cumplir compromisos en sus respectivos países y no pueden quedarse tanto tiempo en Perú.
No obstante, el alcalde de Moche, Arturo Fernández Bazán, afirmó haber contactado a Yusuf y llegar a un acuerdo con este último para ser el encargado de la reconstrucción de la escuela, luego de dar a conocer la ayuda del gobierno federal para la reconstrucción de la escuela será por 6 millones de soles.
Por su parte, Yusuf prometió regresar para navidad y ver cómo quedó la construcción de la casa de Victor y su madre, siendo la única condición para recibirla sacar buenas calificaciones.
Con información de Excélsior, República y Panamericana
Fotografía con imágenes de Telesur y Diario Vecinal de Trujillo