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A fin de reparar su imagen entre los jóvenes, el Papa Francisco dijo que la Iglesia católica tiene que reconocer la historia de dominación masculina y abuso sexual a mujeres y niños, de lo contrario se podría convertir en un museo.
En referencia a la prohibición de tener sacerdotisas, el pontífice afirmó que la Iglesia no está de acuerdo con todas las posturas de algunos grupos feministas.
Actualmente, el pontífice está enfrentando críticas por la respuesta de la Iglesia a décadas de abusos que han causado daños a la reputación de la institución, que en varias partes del mundo ha tenido que pagar miles de millones de dólares en compensaciones.
Estos comentarios fueron expuestos en su Exhortación Apostólica, un documento de 50 páginas con sus reflexiones sobre una reunión de un mes que sostuvo en octubre con obispos para discutir el rol de los jóvenes en la Iglesia de mil 300 millones de fieles.
Ante esta problemática, el Papa instó a los jóvenes a no desilusionarse con el escándalo de abusos sexuales y les pidió trabajar con la mayoría de los clérigos y religiosos que se han mantenido fieles a su vocación.
Una Iglesia (…) puede recordar la historia y reconocer una larga trama de autoritarismo por parte de los varones, de sometimiento, de diversas formas de esclavitud, de abuso y de violencia machista. Con esta mirada dará su aporte con convicción para una mayor reciprocidad entre varones y mujeres, aunque no esté de acuerdo con todo lo que propongan algunos grupos feministas” [sic].
Con fotografía de MVS Noticias.