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El líder del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (Stprm), Carlos Romero Deschamps, acumula tanto años al frente de esta organización como denuncias y señalamientos por corrupción e impunidad y, tras la estrategia para combatir el robo de hidrocarburo del presidente Andrés Manuel López Obrador, se encuentra en los ojos de la opinión pública.
Desde 1993, El Güero –como también se le conoce– es dirigente del Sindicato Petrolero, creado en 1935 e integrado por 36 secciones por todo el país con jurisdicciones propias y obteniendo recursos mediante cuotas sindicales y contrados, que actualmente cuenta con 93 mil 586 afiliados en activo y 52 mil jubilados.
En poco más de 26 años, Romero Deschamps ha acumulado numerosas acusaciones de corrupción y desvío de fondos, todas sustentadas en el tipo de vida que mantienen él y su familia con mansiones y yates y autos de súper lujo.
Sin embargo, el 2018 ha sido un año crítico para el exsenador del Partido Revolucionario Institucional (PRI), pues el 1 de diciembre rindió protesta López Obrador y perdió su escaño en el Senado de la República, por consiguiente el fuero constitucional. Ante esta situación, la justicia parece estar cercana.
En días pasados, durante una de las conferencias matutinas, el Presidente fue cuestionado sobre el futuro del líder petrolero, a lo que respondió:
La decisión es que no se proteja a sindicatos, que no se proteja a dirigentes, que sean los trabajadores los que elijan libremente a sus representantes. [Pero] no queremos actuar de manera espectacular, siempre lo he dicho”.
Pese a que no se han tomado acciones legales en su contra, trabajadores de Petróleos Mexicanos (Pemex) entregaron esta semana ante la Fiscalía General de la República (FGR) pruebas sobre su presunto enriquecimiento ilícito de 150 millones de dólares.
Pero de acuerdo con medios locales, en las últimas horas un juez congeló cualquier orden de captura contra Romero Deschamps, alegando que faltaba información por parte de la FGR.
Al respecto, la periodista Ana Lilia Pérez –que ha investigado a Pemex durante 20 años– recordó que el priista comenzó desde muy abajo en la organización como chófer hasta estrechar lazos con el sindicalista Joaquín Hernández, La Quina.
En 1988, durante el gobierno de Carlos Salinas de Gortari, La Quina fue destituido, encarcelado y amnistiado. Situación por la que Romero Deschamps lo sustituyó tras la designación de un líder interino.
De acuerdo con información de Sin Embargo, uno de los escándalos más cercanos al líder petrolero fue el de Pemexgate: desvío de fondos millonarios del Stprm a la campaña del excandidato presidencial del PRI en las elecciones del 2000, Francisco Labastida; caso del que salió impune.
Ana Lilia Pérez apunta que ‘el caso quedó demostrado y por eso se impuso una multa histórica al PRI’, pero Romero Deschamps, gracias a un amparo, salió limpio.
Su supervivencia al frente del Sindicato Petrolero –puesto en el que se ha reelegido en numerosas ocasiones– también se debe a motivos políticos. En primer lugar porque gozó de fuero en varios periodos como diputado y senador por el PRI.
Por muchos años ha existido una cercanía del sindicato con el presidente de turno. Porque el sindicato garantizaba votos y era un apéndice del PRI”.
En 2013, la aprehensión de su amiga y líder del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Elba Esther Gordillo, pareció un presagio de la caída –o al menos reemplazo– de Carlos Romero Deschamps. Pero no fue así.
Al respecto, el profesor emérito de El Colegio de México (Colmex), Lorenzo Meyer señaló que ‘está en la tradición del sindicalismo oficial mexicano que los líderes se eternicen. Los presidentes no se reeligen, pero los líderes sí’.
Actualmente, con Andrés Manuel López Obrador en la Presidencia y sus promesas anticorrupción, parece reabrirse la posibilidad de investigar a Romero Deschamps, aunque no esté en sus prioridades, pues ahora, según Meyer, debe ‘enfrentar el robo directo de combustible’ sin chocar con el Sindicato.
No obstante, le llegaría su turno tarde o temprano: ‘Carlos Romero Deschamps no puede sobrevivir a López Obrador, porque es su antítesis’.
Con información de Sin Embargo, Milenio y Acustik Noticias.
Fotografías de Nayarit en Línea, The Mexico News y Acustik Noticias.