Acustik Noticias
Juan Pedro Cruz Frías, presidente municipal de Tlalhuelilpan, informó que solicitó al gobierno federal un terreno para sepultar a la gente que murió por la explosión de un ducto de Petróleos Mexicanos (Pemex), pues el cementerio resulta insuficiente.
El presidente aseguró que los restos son demasiados y necesitarán más espacio para darles sepultura. Informó que incluso está por cerrarse un trato con los dueños de un terreno aledaño para ampliar el cementerio municipal.
Hasta el momento se han devuelto 11 cuerpos a los familiares pues son los que han podido ser identificados completamente, pero se espera que el número de cuerpos aumente conforme sean reconocidos por la Fiscalía General de Hidalgo.
Frías declaro que la única manera de detener el problema del robo de combustible es promover el desarrollo económico y social pues se trata de una zona de rezago durante años, lo que, asegura, ha obligado a las personas a participar en actividades ilícitas.
En años recientes ha incrementado el número de tomas clandestinas, y se han registrado al menos seis incendios en ellas, ante esta situación, Cruz Frías manifestó que desde que llegó a la presidencia municipal ha reportado a Pemex un sinnúmero de tomas ilícitas, pero no sabe por qué no se hizo gran cosa para combatir este delito.
Además, aclaró que la comunidad cuenta con 40 policías, que resultan insuficientes para mantener el control de los ductos de Pemex que se extienden por varios kilómetros.
Según información de la Fiscalía Estatal, hasta el momento se han abierto 66 carpetas de investigación por denuncias presentadas por familiares de los desaparecidos en el incidente, al tiempo que se han realizado 61 pruebas de ADN.
Con información de Milenio. Regeneración y Excélsior.
Imagen tomada de Milenio.