La lucha contra el robo de combustible emprendida por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador trae consigo la disminución del delito en un 65 por ciento, en contraste con la baja de calificación que la empresa de Petróleos Mexicanos presentó ante la calificadora Fitch Ratings.
Fitch Ratings o Fitch Inc es una empresa con sede en Nueva York y Londres que se dedica la estadística financiera en el campo de los historiales crediticios, esta otorga calificaciones de diversas corporaciones alrededor del mundo.
Esta mañana la firma sorprendió tras dar a conocer que Pemex bajó su calificación crediticia a largo plazo en moneda local y extranjera. La petrolera mexicana descendió dos lugares, pasó del número ocho al diez, es decir, de una puntuación BBB+ a BBB-.
Fitch Ratings admitió, en su comunicado, que la visualización en el campo de los créditos para Petróleos Mexicanos es negativa.
Asimismo, detalló que este declive de la empresa se debe a que Pemex presenta notas pendientes, aunado al total de emisiones a largo plazo en escala nacional; explicó que la baja se aplica a 80 mil millones de dólares.
Las bajas en la calificación reflejan el continuo deterioro del perfil crediticio independiente de Pemex”.
Ante esta situación, la agencia reiteró que continuará evaluando la actividad de la empresa mexicana y que aunque el historial de apoyo a Pemex por parte de Fitch Ratings ha sido moderado, eso no implica que la petrolera continúe descendiendo.
Según la empresa, Pemex podrá estabilizarse en un lapso no mayor a cinco años, pues por el momento el nivel de inversiones actual es insuficiente ante la reposición de reservas.
Fitch estima que Pemex requerirá una inversión anual aproximada de 15 mil millones de dólares a 18 mil millones para reponer reservas”.
Con información de Político, El Universal y El Financiero