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Hace unas horas un agente de la Administración para el Control de Drogas en Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) detalló cómo fue el operativo para aprehender a Joaquín Guzmán Loera, El Chapo, en febrero de 2014. Aquella ocasión, el líder del Cártel de Sinaloa fue capturado por 24 elementos de la Secretaría de Marina (Semar) en un hotel de Mazatlán, Sinaloa.
La aprehensión se logró luego de que todos los refugios de El Chapo en Culiacán, capital sinaloense, fueran examinados.
El agente Víctor Vázquez se presentó como testigo en la Corte Federal de Nueva York, en donde detalló que Joaquín Guzmán fue capturado alrededor de la 4:30 horas del 22 de febrero de 2014 al interior de un edificio de diez pisos.
Como titular del operativo, Vázquez recibió el código ‘777 confirmado Vic’ de parte de los marinos mexicanos. Esto significaba que habían encontrado y detenido a El Chapo y requerían que Vázquez descendiera al sótano del hotel.
De igual forma, describió que el narcotraficante fue hallado en una habitación del cuarto piso del Hotel Miramar, desde donde lo bajaron al sótano luego de ser asegurado.
Mencionó que los marinos mexicanos desconocían la apariencia del Chapo, por lo que solicitaron al agente que efectuara el reconocimiento del sujeto que tenían detenido y arrodillado. ‘Era El Chapo’, y cuando fue detenido se encontraba junto a su esposa Emma Coronel y sus dos hijas gemelas.
Ante estos comentarios, la defensa de Joaquín Guzmán pidió al agente Vázquez que describiera la apariencia del narcotraficante en el momento en que fue aprehendido, momento en el que se mostró una fotografía en la que se aprecia al Chapo de rodillas, con bigote y algunos hematomas.
Eduardo Balarezo, abogado de Guzmán, preguntó a Vázquez si podía reconocer al detenido y si ese era el aspecto que mostraba al ser retenido. También pidió al juez que el acusado se levantara de su asiento, de tal manera que el agente pudiera comparar el aspecto actual del detenido con el que tenía en aquel entonces.
De acuerdo con información de Sin Embargo, la captura se produjo una semana después de la llegada de los agentes a Culiacán, donde la DEA se dedicó a acabar con la estructura de refugios y túneles de la que El Chapo disponía, para dificultar su vuelta a la ciudad y asegurar su captura posterior en Mazatlán.
No localizaron a Guzmán, pero la DEA arrestó a un individuo identificado como Nariz, que los llevó de tour por cinco localizaciones, todas conectadas a una red de túneles a la que se accedía a través de una bañera que El Chapo utilizó para escapar de los agentes en el último momento.
Sobre estos túneles, el agente de la DEA alegó que en una de las casas que exploraron, escucharon al Chapo lanzar gritos desde el túnel, pero no se atrevieron a bajar porque no sabían si les esperaba una emboscada.
Sobre la detención de Nariz, Vázquez detalló que se produjo en una fiesta en Culiacán el 17 de febrero; agentes de la DEA llegaron e identificaron a los hombres presentes, buscando una Blackberry con un pin determinado, ya que habían interceptado las comunicaciones procedentes de un dispositivo en concreto.
También el 17 de febrero de 2014 fue arrestado otro individuo conocido como Picudo, que fungía como jefe de plaza del cártel de Sinaloa en Culiacán. El Picudo les contó que había hablado con El Chapo esa misma mañana y que lo había trasladado a Mazatlán, lo que puso sobre la pista a la agencia acerca del paradero del narcotraficante.
Con información de Sin Embargo y Excélsior.
Fotografías de López-Dóriga y Expansión.