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Tabasco. 28 de noviembre de 2018.- El pejelagarto es un pescado con escamas duras y dientes afilados, considerado como un platillo exótico en la zona de Tabasco.
Tras el triunfo de Andrés Manuel López Obrador para la presidencia de la República, el negocio de la alfarería en Tabasco dio un giro drástico. Varios alfareros tenían negocios poco redituables pero se han rescatado gracias a que pintan piezas con figuras de pejelagarto, pez al que le debe el sobrenombre el presidente electo.
Debido a que Andrés Manuel nació en Macuspana, Tabasco, se le dio el apodo de ‘pejelagarto’ o ‘peje’. Después de los comicios de julio de este año el denominado pez tomó relevancia.
Distintas asociaciones indígenas que tienen talleres desde hace más de 30 años se veían en medio de una crisis financiera puesto que las artesanías de alfarería no se vendían; sin embargo, cuando López Obrador triunfó en las elecciones, los alfareros vieron una oportunidad y promocionaron las artesanías con motivos de pejelagartos.
La escuela de cerámica Madre Muriel ubicada en Nacajuca, a 20 kilómetros de Villahermosa, Tabasco, es una agrupación que logró éxito pintando pejelagartos en sus artesanías.
“Es uno de los diseños que más se han vendido porque es innovador. Lo asocian mucho con el presidente Andrés Manuel López Obrador porque últimamente ha sido muy popular y el impacto que ha tenido ha sido positivo para la región, y especialmente para este taller”, relató un artesano del grupo Madre Muriel.
El pintado de una pieza de alfarería dura aproximadamente una semana, después se ponen a la venta con precios que van desde los 80 pesos hasta los 11 mil pesos. Entre la variedad de artesanías se encuentran floreros, juegos de té, vajillas, jarrones, charolas, entre otros.
Con información de El Universal, Agencia EFE y Publimetro.
Fotografía tomada de El Informador.