Oaxaca, 18 de noviembre de 2018.- Con la presentación de la edición número 43 de la Vela Muxe de las Intrépidas Buscadoras del Peligro, las fiestas de Juchitán se reanudaron después de un año de suspensión por el luto y los daños económicos que ocasionaron los sismos de septiembre de 2017, en el Istmo de Tehuantepec en Oaxaca.
Esta fiesta nocturna que los muxes llaman vela de las auténticas intrépidas buscadoras del peligro, reúne anualmente cerca de 10 mil personas de todo el mundo.
La vela muxe inicia con una calenda popular, esto significa que las muxes desfilan por las calles del pueblo, visitan a sus conocidos y beben y bailan toda la noche. Es característico de esta fiesta la pasarela en la que participaron 50 muxes sobresalientes del Istmo de Tehuantepec.
Al amanecer se realiza un desfile de carros alegóricos que pasan por las principales calles del pueblo, que en los últimos años este desfile se ha convertido en una especie de marcha del orgullo gay.
Los muxes son hombres zapotecos homosexuales que viven en la región del Istmo, en Oaxaca, y su papel dentro de la sociedad zapoteca es reconocido y protegido como un género extra.
La fiesta muxe comenzó con una misa en la capilla provisional de San Vicente Ferrer, cuyo templo se encuentra seriamente dañado y apuntalado por los daños que le ocasionaron los sismos.
Con información de El Universal y Excélsior