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Indonesia. 4 de octubre de 2018.- Después de que un terremoto de 7.5 grados y un tsunami arrasaran el pasado 31 de septiembre la provincia indonesia de Sulawesi Central, la ayuda internacional ha comenzado a llegar.
Este jueves volvieron a funcionar los servicios de energía eléctrica y redes de telefonía móvil en la ciudad de Palu, capital de Sulawesi Central. Esto ha acelerado un poco la entrega de ayuda a los sobrevivientes.
Hasta hoy, la cifra oficial de muertos ha llegado a mil 424; la mayoría arrastrados por las olas del tsunami o por los desprendimientos de tierra. Se prevé que la cifra seguirá en aumento.
El empleo de maquinaria pesada aceleró la limpieza de escombros y lodo que dejó el tsunami, y ayudó a abrir caminos que permitieron el paso de los primeros camiones con suministros. Las primeras muestra de ayuda fueron las del gobierno local, así como de Australia, Reino Unido y Singapur.
Joko Widodo, presidente de Indonesia, luego de visitar el distrito de Petobo Villahe, una de las zonas más afectadas por el siniestro natural, confirmó la llegada de la primera asistencia extranjera.
‘La ayuda ha comenzado a ingresar. Los aviones de ayuda han comenzado a ingresar’, agregó el mandatario, además de haber agradecido a las organizaciones internacionales y otros países que han ofrecido su ayuda al país.
El que hayan llegado los primeros víveres es una buena noticia, sin embargo, algunos sobrevivientes continúan durmiendo en las calles y buscando comida y agua en tiendas y granjas que quedaron en pie.
En Palu la normalidad ha ido regresando gradualmente, pero muchas otras comunidades siguen aisladas por la destrucción de caminos y puentes o su obstrucción por los escombros que dejaron deslizamientos de tierra o las inundaciones, que dejaron las enormes olas de hasta seis metros de alto del tsunami.
Por otro lado, la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja han revelado que son necesarios 22 millones de dólares para poder ayudar a casi millón y medio de personas que habitan y sobreviven en las zonas más afectadas de Palu y Donggala.
En Indonesia habitan alrededor de 260 millones de personas y es una de las naciones más propensas a los desastres del mundo, pues se encuentra en el llamado ‘Anillo de Fuego’ del Pacífico, donde constantemente chocan las placas tectónicas, lo que provoca actividad sísmica y volcánica.
En 2004 un terremoto de 9.0 grados golpeó la isla indonesia de Sumatra y provocó un tsunami en el Océano Índico. Ambos siniestros mataron a 226 mil personas en 13 países, incluidas más de 160 mil en Indonesia.
Con información de Excélsior, El Universal y Noticieros Televisa.