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CDMX. 22 de septiembre de 2018.- Tras largas exigencias de los padres de los 43 estudiantes desaparecidos de la Normal Rural de Ayotzinapa, resulta que no hay evidencias en video de la noche de la desaparición de los estudiantes. A los padres de los desaparecidos no les parece ninguna sorpresa que los archivos existentes con videgrabaciones de esa noche estén incompletas.
Se trata de archivos de seis cámaras de video del Palacio de Justicia de Iguala que debieron captar los hechos de las noche del 26 y 27 de agosto de 2014. La indignación de los padres ha llevado a exigir a Alberto López Celis, presidente del Poder Judicial, una investigación interna para deslindar responsabilidades administrativas acerca de las secciones eliminadas de los archivos de video que no han sido entregadas a la Procuraduría General de Justicia.
Se sospecha que trabajadores que estaban bajo la jurisdicción de Galeana Marín, a quien responsabilizan por la pérdida de las videograbaciones de seguridad, protegen a los responsables de ocultar la evidencia faltante por lo que los padres también han exigido al Tribunal Superior de Justicia que estos trabajadores sean suspendidos de sus puestos hasta que el caso se aclare con la aparición de la evidencia.
Ahora bien, Vidulfo Rosales Sierra, abogado de las víctimas, reconoce que es sumamente importante la reintegración de los momentos faltantes en las videograbaciones, pues su antecesor, Robespierre Robles Hurtado, sólo pudo dar a la PGR para su análisis una USB con imágenes que muestran instantes posteriores y anteriores a las agresiones contra 15 o 20 estudiantes.
Dadas las exigencias de los padres de las víctimas, López Celis sólo pudo ofrecer como defensa que él no podía dar mayor explicación que lo que le dejó Galena Marín durante su administración señalando los folders que contienen la evidencia y registros de la noche de los hechos.
“No tenemos nada que esconder, aquí está lo que el anterior presidente entregó a la PGR, todo lo relacionado con el equipo de cómputo, de eso ustedes tienen ese oficio, pero no tenemos inconveniente, abrimos a quien nos diga, ni vamos ocultar a la persona que haya incurrido en responsabilidad, pero no podemos seguir sosteniendo cuestiones que nosotros no cometimos”, mencionó López Celis.
Estas palabras fueron el detonador para que Rosales Sierra iniciara la formación de una Comisión que investigue los hechos de Ayotzinapa, de lo que sólo nos queda esperar resultados así como de los procesos penales en contra de Galena Marín y de los supuestos empleados encubridores.
Con información de Sin Embargo y La Jornada