Claudio Hernández | Acustik Noticias
CDMX. 27 de agosto de 2018.- A pocas semanas del final de la temporada regular en las Grandes Ligas de Béisbol, el equipo que, indudablemente, se perfilaba como el claro favorito a llevarse el Clásico de Octubre, ha caído en su peor racha de la temporada, si aún no saben a quién me refiero, es obviamente, a los Red Sox de Boston.
Es indudable que, aunque a muchos nos pueda doler, el equipo de los medias rojas eran, hace apenas una semana, por mucho, ‘el mejor equipo de las grandes ligas’, lideraban en todo las mayores; juegos ganados, mejor diferencia, porcentaje de bateo, home runs, e incluso, el promedio más importante del béisbol, el Wins Above Replacement ó WAR; sus jugadores eran líderes en todas las estadísticas de bateo, fildeo y pitcheo, y tenían en Mookie Betts, J.D. Martínez, David Price y Craig Kimbrel, casi asegurados los premios de MVP, Hank Aaron, CY Young y Reliever of the Year Award, respectivamente.
Es por eso que es tan preocupante la fuerte caída que ha sufrido el equipo patirrojo en la última semana, perdiendo sus series ante Tampa Bay y Cleveland respectivamente, con un Betts apagado, un J.D. Martínez incapaz de pegar cuadrangulares, un David Price con salidas cortas y poco efectivas, y aún más sorpresivo, un Kimbrel fallando como nunca antes se había visto.
Quizá, si está semana se reponen, todo lo sucedido en la pasada quedará en el olvido, pero es preocupante para los aficionados de los Red Sox, ya que hay esta versión de los bostonianos es fácilmente comparable con muchas otras anteriores a la época de David Ortiz, cuando estaba vigente, la famosa maldición del ‘bambino’, época en la que, sin importar la buena temporada de los originarios de Massachusetts, al final entraban en mala racha y perdían en postemporada.