Por Ilse Aguilar | Acustik Noticias
CDMX. 14 de agosto de 2018.- Un total de 24 casos de internos que fallecieron en penales de reclusión de la Ciudad de México, fueron resultado de suicidio en los que imperó la violación de derechos humanos, comprobó la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México (CDH).
La recomendación 04/2018 emitida a la Secretaría de Gobierno el día de hoy por la presidenta de la Comisión, Nashieli Ramírez, documenta que de los suicidios comprobados, a las familias no se les informó de la muerte hasta días después, o simplemente hasta que se les permitía acceder a las visitas y los internos “ya no estaban”.
Aunque el año 2015 registró el mayor número de muertes, desde 2010 se documentaron suicidios: 4 en el Centro Femenil de Reinserción Social de Tepepan; 3 el de Santa Martha Acatitla; 6 registrados en el Reclusorio Preventivo Varonil Oriente; 5 en el Reclusorio Varonil Norte; 3 en el Sur; 1 en Santa Martha; y 2 en la Penitenciaría de la CDMX.
Desde una agujeta, instrumento más utilizado, un suèter, cuerda, cobija, lazo, cinta, cable, zacate y cinturón, fueron las formas en que los presos de entre 19 y 30 años se quitaron la vida.
A más de ocho años de los sucesos, ninguna de las familias ha recibido apoyos de contención o psicológicos.
La recomendación tiene un plazo de 15 días de respuesta para atender las cinco observaciones en el programa contra suicidios, el cuidado de los espacios penitenciarios, evaluaciones, así como las bebidas y drogas psicotrópicas que no deberían de consumirse en los penales.
De acuerdo con INEGI, de 2010 al 2017, de los 41 mil 321 suicidios registrados en el país, 7 mil 819 ocurrieron en la Ciudad de México, es decir un 17 por ciento del total, convirtiéndose los suicidios a nivel mundial en un problema de salud pública.