CDMX. 1 de mayo de 2018.- Con un enfoque de conservación y para dar respuesta a los desafíos que plantea el desarrollo y el cambio climático, el Centro Interdisciplinario de Investigaciones y Estudios sobre Medio Ambiente y Desarrollo (CIIEMAD), del Instituto Politécnico Nacional (IPN), trabaja en el establecimiento de un Observatorio de Cambio Climático en las costas de Quintana Roo.
Norma Patricia Muñoz Sevilla, investigadora del CIIEMAD informó que el Observatorio se ubicará en Pez Maya, Reserva de la Biosfera de Sian Ka’an, Quintana Roo, predio que cuenta con 25 hectáreas y tres kilómetros de playa para la conservación costera, marina y de humedales, en donde un grupo de expertos llevarán el control de una serie de parámetros ambientales, meteorológicos, físico-químicos, de calidad de agua, evolución de la línea de costa y evaluación geoquímica de la zona de manglar, entre otros.
Explicó que la entidad es una región altamente productiva desde el punto de vista de los ecosistemas, forma parte del arrecife mesoamericano (el más importante del mundo después de la Gran Barrera de Coral en Australia), pero al mismo tiempo, es vulnerable al calentamiento global y fenómenos naturales que cada vez son más intensos, como ocurrió con el huracán Gilberto (septiembre de 1988), en donde el 50 por ciento de Cancún sufrió graves daños en su infraestructura y playas.
En los últimos años, el tema de los océanos ha tomado fuerza, México es un país favorecido con la presencia de dos océanos, un golfo único que es el de California o Mar de Cortés y el Golfo de México, compartido con Estados Unidos y Cuba, así como una porción del Mar Caribe, situación que nos obliga a proteger, conservar y hacer un uso sustentable de esos grandes ecosistemas marinos.
La también presidenta del Consejo de Cambio Climático en el marco del Sistema Nacional de Cambio Climático señaló que este proyecto está relacionado con otra estación meteorológica instalada en Sinaloa hace ocho años, lo cual permitirá conocer la interrelación entre las costas del Golfo de México y Mar Caribe y el Pacífico norte, ya que son cuerpos de agua que se comportan muy diferente por su ubicación geográfica y características geomorfológicas y de vocación.
Por su ubicación geográfica del país, la vulnerabilidad siempre está presente, sobre todo por la intensidad y frecuencia de los fenómenos naturales, siempre están las leyes de la naturaleza, pero el hombre no concibe el crecimiento verde o sustentable, ya que se destruyen las dunas o las zonas de manglares, los cuales sirven de protección o bien de anidación, crecimiento y desarrollo de especies de alto valor económico, así como sistemas naturales para depuración del agua.