Por David Rodríguez/Acustik Noticias
CDMX. 12 de abril de 2018.- La Procuraduría General de la República (PGR) ya contaba con información de la comunicación que hubo entre el crimen organizado y autoridades del estado de Guerrero, que sostenían desde Chicago, Estados Unidos, para el ataque y desaparición de los normalistas de Ayotzinapa, pero buscó mantenerlo escondido.
En entrevista exclusiva para Acustik Noticias, Carlos Beristain, exintegrante del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), aseguró que las autoridades mexicanas ya contaban con los datos otorgados por Estados Unidos, sobre todo en las llamadas donde se daban indicaciones para actuar contra los estudiantes.
Sin embargo, comentó que toda esta información les fue negada, a pesar de que el GIEI ya tenía conocimiento de esa diligencia, pero fue hasta el final de su estancia cuando se les pudo proporcionar algún tipo de informe.
“Durante el tiempo del primer reporte pedimos a PGR que se diera una asistencia técnica para conocer si existían estas escuchas que nosotros teníamos información de que si existían, pero no sabíamos su contenido y pedimos a PGR que pidiera una asistencia técnica para conocer el contenido de esa información u otras que pudieran estar en manos de autoridades de Estados Unidos.
Durante el primer mandato no se hizo ninguna gestión en ese sentido y sólo se hizo una gestión al final de ese mandato y este es el resultado de esas gestiones que nosotros propusimos hacer desde el principio, no conocíamos las revelaciones, el contenido de esas posibles comunicaciones, lo que si muestran esas posibles comunicaciones es una coordinación del crimen organizado con autoridades del Estado y eso es parte que tienen que ser investigado, abre muchas de las cosas que nosotros dejamos planteadas en las líneas de investigación”, comentó.
Beristain participó en un equipo de expertos conformado por Ángela Buitrago, Claudia Paz y Paz, Francisco Cox y Alejandro Valencia para apoyar en las investigaciones de la desaparición de los 43 alumnos de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos, en enero de 2015.
El también médico y doctor en psicología español recordó que antes de la llegada de los expertos de la CIDH y de la desaparición de los normalistas, la PGR contaba con información del trasiego de heroína en la ruta de Iguala-Morelos-Chicago; e incluso la detención de Gonzalo Martín Souza Neves, ‘El Uruguayo’, fue meses atrás de los hechos en Iguala.
“La PGR tiene una información previa de nuestro caso que habían detenido al ‘uruguayo’ por tráfico de heroína entre Iguala, Morelos y Chicago, esa información que sí tenía la PGR tres meses antes del caso de los chavos y ocho meses antes de que nosotros llegáramos al país, esa información no se nos proporcionó, esa fue información previa que confirma que ya había en Chicago, de forma pública, fue información que nosotros dimos a conocer que era un caso abierto con la Fiscalía de Illinois y confirma además la información sobre las escuchas telefónicas”.
Sobre la información que se publicó de que podrían haber desaparecido hasta 60 personas el 26 de septiembre de 2014, Beristain descartó esta versión y argumentó que la confusión por el momento fue lo que se quedó grabadas en esas conversaciones.
“No yo creo que esa es parte de la confusión de los dos primeros días sobre el número de desaparecidos, al principio de los hechos hubo esta cifra porque hubo jóvenes que huyeron, se escondieron, trataron de proteger su vida y que en los primeros días no aparecieron, los primeros días de los hechos había dudas de cuántos eran en realidad, hasta que se confirmó la cifra de los 43”, dijo el experto.
El exintegrante del GIEI declaró que será elemental que los representantes de los familiares de los estudiantes de Ayotzinapa desaparecidos y el nuevo gobierno que tome posesión lleguen a un acuerdo, con el objetivo de impulsar las investigaciones y solucionar este caso.
Sin confirmar que podrían volver a territorio mexicano para seguir con las diligencias, Beristain aseguró que la asistencia brindada a las autoridades mexicanas funcionó para esclarecer algunos aspectos que la PGR no había encontrado o no quiso revelar.
“Lo que nosotros podemos decir es que el mecanismo de asistencia técnica del GIEI fue muy eficaz, las revelaciones más importantes del caso fueron proporcionados por la asistencia técnica que se pudo hacer, que el caso sigue abierto y que ojala haya un acuerdo entre los representantes de los familiares y el nuevo gobierno mexicano para que se articulen mecanismos eficaces. El GIEI mostró la eficacia de la asistencia técnica internacional y esa asistencia podría ser muy importante para el caso”, concluyó.