CDMX. 10 de marzo de 2018.- La diputada Karina Sánchez Ruiz destacó la importancia de intensificar programas integrales de apoyo médico, nutricional y psicológico a niños portadores del Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) junto con sus familias, con el propósito de brindarles una mejor calidad de vida.
La integrante de la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados de la bancada del Partido Nueva Alianza refirió que de acuerdo con datos recabados por la Clínica para menores con VIH/Sida de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), alrededor de siete mil 526 niños y adolescentes en México padecen del virus de la inmunodeficiencia humana.
Señaló que la principal forma de transmisión en pacientes de edad pediátrica, que va del nacimiento hasta los 16 años, es de forma hereditaria, es decir, las madres seropositivas infectan al producto durante el parto o a través de la lactancia materna.
“El progreso del síndrome de inmunodeficiencia adquirida en los niños es más rápido y menos predecible que en los adultos y el tratamiento recomendado para los niños suele ser más agresivo. Por ello, debemos garantizar un acceso temprano al tratamiento, para atender a este sector de la sociedad”, expuso.
Según el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), el acceso a un tratamiento antirretroviral (TAR) para niños y mujeres embarazadas con Sida llega a menos de un tercio comparado con el promedio mundial de tratamientos para adultos, cuya población atendida se estima en 1.65 millones de personas.
En ese sentido, aseveró que debido a que el progreso del VIH en los niños es más rápido y menos predecible que en los adultos, es importante motivar a las madres a realizarse pruebas de detección del virus, de preferencia durante el primer trimestre de embarazo, con lo cual se puede impedir el contagio.
Agregó que para el Consejo Nacional para la Prevención y el Control del Sida (Conasida) no sólo es necesario proporcionar fármacos antirretrovirales como la lamivudina y etravirina, sino cuidar que el paciente goce de salud en la medida de lo posible, con una alimentación rica en proteínas y vitaminas.