Este miércoles, la muerte de Gerardo Ruiz Esparza tomó por sorpresa a medios de comunicación y sociedad en general, la cual fue confirmada por el expresidente Enrique Peña Nieto a través de su cuenta de Twitter.
Lamento profundamente el fallecimiento de mi amigo y excolaborador, Gerardo Ruiz Esparza, gran ser humano y servidor público de excelencia; responsable de importantes proyectos de infraestructura en todo México. Mi más sentido pésame y abrazo solidario a su familia y amigos. QEPD”, (sic).
Lamento profundamente el fallecimiento de mi amigo y excolaborador, Gerardo Ruiz Esparza, gran ser humano y servidor público de excelencia; responsable de importantes proyectos de infraestructura en todo México. Mi más sentido pésame y abrazo solidario a su familia y amigos. QEPD
— Enrique Peña Nieto (@EPN) April 1, 2020
Ruiz Esparza fungió como secretario de Comunicaciones y Transportes durante el sexenio de Peña Nieto (2012-2018). Durante ese periodo, el exfuncionario estuvo rodeado de polémicas y escándalos que marcarían su carrera como servidor público.
Fue en el año de 2017 cuando un socavón emergió en pleno Paso Express de Cuernavaca, obra inaugurada tres meses atrás con una inversión de más de 2 mil millones de pesos. Ante el hecho, dos personas perdieron la vida al no poder rodear el gran agujero que se formó en medio de la carretera frente a los ojos de propios y extraños.
Tras lo sucedido, la sociedad civil y Organizaciones No Gubernamentales (ONGs) exigieron justicia para la familia de los fallecidos, especulando un posible acto de corrupción detrás de la construcción, además de pedir la renuncia del entonces titular federal de Comunicaciones y Transportes.
El nombre de Gerardo Ruiz Esparza también podría estar involucrado en la llamada ‘Estafa Maestra’, que igualmente sucede en el periodo peñista; operación donde se otorgaron al menos 40 contratos a universidades públicas para posibles malversaciones de recursos federales.
El servidor público había sido internado el pasado lunes en un hospital privado al poniente de la Ciudad de México, debido a un infarto cerebral que al parecer no resistió.
Al momento de su muerte Gerardo Ruíz Esparza tenía 70 años de edad, contaba con una Maestría en Derecho y le sobreviven su esposa Rocío Dosal Noriega, así como sus hijos Karla y Gerardo.
Con información de El informador, El Heraldo de México y El Universal
Imágenes tomadas de Instagram ortmexusa, @gruizesp, jcabreu_periodista