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La explosión de una planta de gas en Yima, China, ha cobrado la vida de diez personas y ha activado la alerta de desaparición por cinco víctimas.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 17:00 horas del viernes, en el área de separación de aire de la fábrica Henan Coal Gas Group, ubicada en la localidad de Yima, perteneciente a la ciudad de Sanmenxia, al sudoeste de Pekín.
La catástrofe dejó diecinueve personas heridas, mismas que fueron trasladadas por los servicios de salud a los hospitales de la localidad.
El medio Xinhua informó que la explosión no abarcó el departamento donde se encontraban los depósitos de gas, por lo que el siniestro pudo ser controlado por elementos de protección de Pekín, los cuales frenaron el funcionamiento de la fábrica para su labor de cese al fuego.
El estruendo del estallido dejó vidrios rotos y daños en algunas viviendas cercanas a la zona en un radio de tres kilómetros, lo que provocó pánico entre los pobladores, quienes informaron que el área se llenó de humo negro.
Durante las labores de rescate al interior del recinto afectado, se podía ver a los elementos de paramédicos laborar, de manera rápida, mientras arriesgaban su vida ingresando al sitio del siniestro con pañuelos en la boca y nariz para protegerse de la emanación de carbono.
La falta de operación protocolaria en las plantas de China es una constante, por lo que es habitual que se presenten explosiones por falta de precaución.
Tan solo en marzo del presente año se registró una explosión en una planta química en Yancheng, misma que dejó 78 víctimas mortales y provocó la destrucción de decenas de viviendas en el área aledaña.
En junio también se suscitó un hecho similar en una fábrica de biotecnología, ubicada en la provincia central china de Henan, donde seis personas fallecieron.
Con información de Excélsior, El Universal y Vanguardia
Fotografía tomada de Excélsior