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Estado de México. 25 de octubre de 2018.- Tras los incidentes sucedidos en Naucalpan el día de ayer, las investigaciones para determinar las identidades o a qué grupo delictivo pertenece el conjunto armado capturado en video no se han detenido. Muchas hipótesis ya han sido formuladas sobre el hecho, sin embargo no se ha llegado a ninguna conclusión.
De acuerdo con información de la PGR, en el Estado de México se sabe de dos cárteles operantes que podrían ser la primera opción dentro de las posibilidades a tener en cuenta. Una primera opción a considerar es la de La Empresa, una célula de La Familia Michoacana que radica y opera en el Estado de México. La segunda opción es la de los Gerreros Unidos, un remanso del desaparecido cártel de los Beltrán Leyva que al parecer podría estar involucrado en el caso.
Ahora bien, encargados de la policía del Estado de México aseguran que se trata de un grupo perteneciente al Cártel de Jalisco Nueva Generación dirigido por Nemesio Oseguera Cervantes, información que corrobora Aristegui Noticias.
Otra de las hipótesis fraguada por Victor Manuel Sánches Valdés de Animal Político indica que no solamente el CJNG pudiera estar involucrado, sino que la violencia presente en el Estado de México, y la aparición del convoy en Naucalpan, se debe a la presencia en 125 municipios del Estado de La Familia Michoacana, los Zetas, el Cártel de Sinaloa, el Cártel del Golfo, los Guerreros Unidos y hasta de los Caballeros Templarios.
Después del mapeo realizado por Sánches Valdés se determinó que el órgano delictivo con mayor presencia en el Estado de México es La Familia Michoacana, quien ocupó unos 80 municipios hasta 2017 mientras que durante 2014 sólo ocupaba 74 municipios y aunque estuvo al borde su desaparición hace unos años, la organización delictiva ha retomado gran fuerza tras establecerse en Estado de México. Argumentos que apoyan fuertemente esta hipótesis es que en este estado, además de encontrarse en una posición geográfica central, cuentan con aeropuertos, caminos y una amplia red de distribución hacia los estados más poblados del país, entre ellas la Ciudad de México, Guerrero, Morelos y Michoacán, los cuales siempre han sido un baluarte importante para el narcotráfico.
Con información de Animal político, Aristegui Noticias y El Sol de México.