CIUDAD DE MÉXICO, 2 de julio de 2018.- Con corte a las 15:03 horas de un día después de las elecciones y casi el 70 por ciento de las casillas computadas, el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) mantiene a la Juntos Haremos Historia (Morena, PT y Encuentro Social) con la mayoría absoluta en el Senado de la República, alcanzando 70 de los 128 escaños en la Cámara de Senadores, lo que representa más del 50 por ciento.
Con 16 millones 161 mil siete votos, el partido fundado por el presidente electo Andrés Manuel López Obrador obtuvo la mayor preferencia con 479 mil 643 sufragios, seguidos de 36 mil 7892 del PT y 20 mil 557 del PES. Le sigue el PAN que alcanzaría 22 lugares, para mandar al PRI a la tercera fuerza política alcanzando 19 escaños y dejándole al PRD con cinco curules. De lo anterior, hasta el momento, Morena se coloca como la primera fuerza política en el Senado con 48 curules.
La mayoría absoluta en el Senado se mide por el porcentaje de votación correspondiente a la mitad más uno de los integrantes de alguna de las cámaras del Congreso de la Unión al momento de tomar una decisión o realizar una votación.
Sin embargo, hasta ahora, dicha alianza no alcanza la mayoría calificada que, conforme a lo dispuesto en la Constitución, Ley Orgánica del Congreso General, Reglamento y demás disposiciones aplicables, no alcanza la mayoría calificada que corresponde a las dos terceras partes, cuando menos, de los legisladores que se encuentran presentes en el salón de plenos al momento de tomar una decisión o realizar una votación.
Considerando que la Cámara de Senadores está integrada por 128 legisladores, se requerirían de 85 de para lograr este porcentaje de votación especial y reformar la Constitución, variando el número en función de los senadores presentes en la sesión de Pleno. En general, se considera mayoría calificada a aquella donde se exigen porcentajes especiales de votación, como dos tercios o tres cuartas partes del número total de votos o votantes.
Es decir, su significado se explica en la necesidad de ampliar el consenso entre las fuerzas políticas integrantes del Senado. Esto, con la finalidad de que vayan más allá de la simple mitad más uno de los votantes, sobre todo cuando se trate de determinadas reformas legales o asuntos trascendentes —como la elección de los integrantes de la Mesa Directiva— donde se requiera por su importancia un apoyo considerable del cuerpo que integra un Parlamento o Poder Legislativo.
Fuente: Quadratín.