Las 3 unidades de medida que también cambiarán en 2019

Internacional, 17 de noviembre de 2018.- El kilogramo, la unidad de medida que por casi 130 años ha unificado a las balanzas de casi todo el mundo, ha cambiado, pero esta no será la única medida que sufrirá cambios a partir de mayo del próximo año.

El Comité Internacional de Pesos y Medidas representado por más de 60 países ha decidido que un kilogramo ya no pesará un kilo, o bien a la medida que se tenía como referencia fiel en el prototipo conocido universalmente, el pequeño cilindro de platino resguardado con como medida fiel bajo tres llaves y varias bóvedas en una cripta en las afueras de París.

Esto significa que, a partir de ahora, el kilogramo se definirá en términos de constantes que describen el mundo natural y su valor estará relacionado a ‘características fundamentales’ del universo.

Las otras tres medidas del Sistema Internacional de Unidades (SIU) que también cambiaron tendrán un impacto en la investigación científica, por lo que serán los laboratorios quienes tendrán que acoplarse principalmente al nuevo régimen.

En la temperatura

Aunque comúnmente hacemos uso de los grados Celsius o Fahrenheit, el kelvin es usado en la ciencia y mide el punto en el que las moléculas y átomos de un sistema tienen la mínima energía térmica posible.

A partir de ahora, el valor del kelvin quedará establecido también por una constante física: la de Boltzmann, que relaciona temperatura absoluta y energía.

En la electricidad el cambio equivale a una descarga eléctrica para los antiguos libros de física. La unidad encargada de medir la intensidad de la corriente eléctrica ya tampoco será la misma.

El ‘amperio internacional’ a partir de ahora, el amperio se definirá por el electrón, es decir, equivaldrá a la energía contenida en electrones individuales pasando por un punto en un circuito.

La sustancia

Para muchos de nosotros, el mol es solo un viejo recuerdo de los experimentos de química. Sin embargo, la unidad con la que se mide la cantidad de sustancia es una de las siete magnitudes físicas fundamentales del SIU y tiene una importancia vital en la investigación científica.

Por años, los químicos intentaron determinar el número de partículas fundamentales que podría haber en una muestra, acordando que el mol equivalía a tantas partículas elementales como átomos de carbono hay en 0.012 kg de carbono 12.

Finalmente, el Comité de Pesos y Medidas estableció que el valor que definirá la cantidad de sustancia será la llamada constante de Avogadro, que equivale al número de partículas constituyentes que se encuentran en la cantidad de sustancia.

Aunque es importante para la historia recordar, que esta no es la primera vez que el SIU cambia sus unidades internacionales, ya sea que tenga efecto en la vida cotidiana o sólo para la ciencia.

El metro, por ejemplo, que tenía cuya medida universal era una vara de platino, pasó a vincularse desde la década de 1960 con la distancia a la que la luz viaja en el vacío en 1/299.792.458 de segundo.

En 1967, la forma de medir el tiempo se define por un reloj atómico de cesio que no se atrasa ni adelanta en un promedio de 1.4 millones de años.

La candela se redefinió en 1979 para basarse en el brillo de una fuente que emite luz a una frecuencia específica en la parte verde del espectro, a la que se encuentra el ojo humano.

Y por último, años más tarde, la velocidad de la luz a través del vacío sería la nueva vara con la que se mediría esta magnitud

 

Con información de BBC Mundo