CDMX. 26 de octubre de 2018.- Si bien el crecimiento de 3.0 por ciento de la agricultura mexicana en el actual sexenio no es espectacular, sí rompe con los anteriores, en los que hubo caídas de hasta menos uno por ciento, afirmó Cassio Luiselli Fernández, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
El especialista del Programa Universitario de Estudios del Desarrollo de la UNAM consideró que el dinamismo de este sector se debe a dos situaciones: las agroexportaciones significativas de pequeños sectores que generaron cadenas de valor con Estados Unidos, y el aumento del consumo de semillas en las ciudades.
En el marco del XXXVIII Seminario de Economía Agrícola, en el auditorio del Instituto de Investigaciones Económicas (IIEc), Cassio Luiselli expuso que en este sexenio las cifras preliminares de exportaciones de aguacate, berries, jitomate y chile, entre otros productos, alcanzaron 32 mil millones de dólares.
Por su parte, el investigador del IIEc, Felipe Torres, refirió que la agricultura es un renglón estratégico en términos de desarrollo económico, ya que ninguna política económica funciona si no se tiene como sustento la producción y seguridad alimentaria.
Ante este panorama, prosiguió Luiselli Fernández, debemos cuestionarnos si contamos con tierra suficiente.
Destacó que la superficie potencial productiva es de 31 millones de hectáreas, de las cuales se cultivan 22 millones; sin embargo, añadió que 47 por ciento de los suelos del país están sobreexplotados.
Resaltó que se debe hacer un esfuerzo para que México tenga sus propias semillas y no transgénicas, ‘ya que con las criollas además de generar seguridad alimentaria, salvaremos la memoria genética del país’.
El experto refirió que plantear producir el 75 u 85 por ciento de nuestros requerimientos alimentarios, sería factible y legítimo, ya que depender de otras naciones ‘puede ser un arma alimentaria’.
Con información de Notimex.