Robinson Canó suspendido por dopaje

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Claudio Hernández / Acustik

CDMX. 16 de mayo de 2018.- En el béisbol se juegan más de 100 partidos por temporada, para esto se necesita tener un primer equipo de 25 jugadores, y un roster de 40 posibles suplentes para la temporada, de los cuales en promedio se utilizan, en algún momento de la temporada el 99% de los jugadores de cada equipo, es por eso que uno de los más grandes honores que hay en el deporte rey es ser considerado un jugador franquicia.

En 2009, los Yankees de Nueva York tenían un equipo que verdaderamente daba miedo, con la contratación de Mark Texeira para jugar la primera, la mejor versión de Alex Rodríguez en la tercera, los eternos Derek Jeter y Jorge Posada en el Shortstop y el Catcher respectivamente, y unos jardineros increíbles como eran Hideki Matsui, Johnny Damon y Nick Swisher, todos comandados por pitchers como CC Sabathia, Andy Pettite y por supuesto el mejor cerrador de la historia, Mariano Rivera.

A este equipo solo le faltaba un ingrediente para ser imparable, un segunda base al nivel del resto, y fue ahí cuando, ante el rumor de la posible llegada de Ian Kinsler a los bombarderos del Bronx, el manager, en ese entonces declaró que le darían la oportunidad al que venía siendo el segunda de los Yankees por 4 años y que había mejorado mucho su bateo, y hablaba de Robinson Canó.

Un joven nacido en la República Dominicana, y uno de los beisbolistas más destacados de los últimos años, después de ese voto de confianza Canó se convirtió en uno de los mejores jugadores en las grandes ligas, y por varios años, el mejor segunda base, gano el MVP y el Home run Derby en el mismo año, e incluso, perdió el lugar como el jugador franquicia de los Yankees para irse a los marineros de Seattle, en lo que fue, en su momento, el contrato más caro en la historia de la MLB.

Canó era un ejemplo a seguir por donde lo vieras, un tipo que lo había ganado todo en el béisbol, humilde y caritativo, siempre centrado y trabajador, que no solo gano todo lo posible con su equipo, sino que también con su país, ya que, también ganaría un mundial de béisbol con la Republica Dominicana, en el que sería el MVP del torneo.

Es por todas estas razones que es tan doloroso para la MLB, y en general para el mundo del béisbol, dar la noticia de que Robinson Canó ha sido suspendido 80 partidos por el uso de sustancias indebidas, una enorme mancha en la carrera de cualquier deportista, que prácticamente termina con sus aspiraciones de entrar algún día al salón de la fama de Cooperstown, de un jugador que iba, o, mejor dicho, que parecía ir directo al salón de las leyendas

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